tag:blogger.com,1999:blog-51813213965507258072024-02-07T14:35:11.443+01:00EL SUEÑO DEL ANDROIDEMIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.comBlogger63125tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-63716323103799567182012-01-23T16:55:00.001+01:002012-01-23T16:56:54.766+01:00GRAVEDAD (LA GRAN ESTACIÓN)<div align="justify"><em>“La Tierra ha juzgado a la humanidad y su sentencia ha sido inapelable. Del castigo han escapado cuatro astronautas que logran establecer una base en la Luna.<br /><br />Han pasado mil años desde aquella fundación y los habitantes de Ciudad Mercurio sienten como los cimientos de una sociedad, en apariencia perfecta, se tambalean ante un grave crimen cometido contra las enseñanzas de los Padres. Travis ,el joven habitante de una granja de producción de energía, es acusado y deberá huir hacia un espacio desconocido”.</em><br /><br />Y bajo esta sinopsis he publicado mi tercera novela. Una que iba a ser una continuación de los dos relatos de “Gravedad” que ya había publicado en este blog… y así ha sido, una continuación, pero que es un relato independiente. Una novela en la que nuevamente las fuerzas externas son las que dirigen las actuaciones de una persona, Travis en este caso, un habitante de Ciudad Mercurio que es acusado de un crimen brutal, además de haber profanado la memoria y enseñanzas de los Padres (los fundadores de esa ciudad en la Luna).<br /><br />Quiero que se vea como una historia de aventuras y amor al estilo de Robert E. Howard, Edgar Rice Burroughs y con tintes lovecraftianos. Pero también una historia costumbrista de ciencia ficción, un relato desgarrado sobre la toma de conciencia humana. Y quien quiera ver algo más encontrará una alegoría del cristianismo, un semblante poco amable del extremismo, incluso cuando este se pinta de ecologismo. Un fresco sobre la frustración, sobre la tiranía, una vuelta de tuerca sobre los fantasmas colectivos, sobre la utilización de la masa, sobre la anestesia de la religión, sobre lo que queda de un mensaje primitivo escrito a conveniencia de los que gobiernan. Una historia sobre las cadenas que nos atan, las que lo hacen con nuestro pensamiento y de las que lo hacen con nuestro cuerpo. Sobre quien quiere ser salvado y quien vuelve a su jaula una y mil veces. Quizás en un mundo paralelo muchas de las cosas que suceden en este libro podrían haber ocurrido en el nuestro, y quizás estén pasando.<br /><br />Pero es simplemente una historia de aventuras, como decía, que espero que se lea de forma amena y se disfrute de la misma manera. Viajad con Travis a la Luna, y de allí a otros mundos, y que cada cual saque sus conclusiones personales. </div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-61097750726420651952011-11-03T12:35:00.002+01:002011-11-03T12:36:08.488+01:00PORTADA<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9aUgUnipjeTbM5iYqLJF0r_yvUf6A00-MP9CbSgkQTRiYnmR5_AaXFUxgaPaQfIjzRgyYHGboo0-NQWN2wXBTxBXayx164UfZRdTr-HhAD5zgqsm-uXL-1fHcHzuH8QApZJLwef9abimx/s1600/Gravedad+2.jpg"><img style="display:block; margin:0px auto 10px; text-align:center;cursor:pointer; cursor:hand;width: 300px; height: 400px;" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi9aUgUnipjeTbM5iYqLJF0r_yvUf6A00-MP9CbSgkQTRiYnmR5_AaXFUxgaPaQfIjzRgyYHGboo0-NQWN2wXBTxBXayx164UfZRdTr-HhAD5zgqsm-uXL-1fHcHzuH8QApZJLwef9abimx/s400/Gravedad+2.jpg" border="0" alt=""id="BLOGGER_PHOTO_ID_5670731903891330290" /></a>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-69367441933951587722011-06-16T19:07:00.001+02:002011-06-16T19:07:55.902+02:00DESORIENTADOS<div align="justify">Tal vez si hubiera preguntado dónde, no estarían perdidos en aquella maraña de calles iluminadas de Las Vegas. Pero claro, como iba él a bajar la ventanilla y hacer pública su ignorancia, pensaba ella.<br />-¿No actualizaste los datos del GPS antes de salir?- le preguntó ella.<br />-Descargué los registros de Júpiter por error.<br />-Otra vez nos perderemos la convención anual del “Área 51”- dijo con resignación.<br />El platillo volante desapareció en el cielo.</div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-33163821360653331132011-06-14T10:33:00.001+02:002011-06-14T10:33:55.692+02:00EL DESCENSO<div align="justify">-¿Tal vez si hubiera preguntado dónde?<br />-Hubieras venido a parar igualmente aquí- afirmó el hombre elegantemente vestido.<br />-Pero un tal Pedro me dijo que sería mi paraíso y yo sólo veo a mi alrededor, muerte, fuego y destrucción.<br />-Aquí te sentirás como en casa. Te he preparado varios escenarios que reconocerás fácilmente, así se te hará más llevadera tu eterna estancia. A este primero le llamamos “Verano de campo en Mauthausen” y para que te integres en las actividades te hemos preparado este pijama a rayas.<br />-¡Qué me lleven los demonios! </div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-40408309398158156102011-03-05T18:51:00.004+01:002011-03-05T19:00:37.213+01:00AMOR ETERNO<div align="justify">Seguimos sin hablarnos. Ella acostada a mi lado, con su delgada mano sobre mi pecho. Su mirada perdida en alguna lejana estrella del cielo, mis ojos escrutando su blanco perfil iluminado por la luna llena. Mi corazón galopa en la noche, inflamado por su infinita belleza. Le susurro palabras de amor, pero ella no me contesta. Hace tanto que no pronuncia mi nombre que mis lágrimas se derraman por mis mejillas. Y yo muero por su amor...<br /><br />“EL CORREO MATINAL”<br />“...fue encontrado en el cementerio junto al cuerpo de su mujer fallecida cinco años atrás...”</div><br /><br /><a href="http://bitacoras.com/anotaciones/ http://elsuenodelandroide.blogspot.com/2011/03/amor-eterno.html"><img src="http://widgets.bitacoras.com/votar/normal/ http://elsuenodelandroide.blogspot.com/2011/03/amor-eterno.html" alt="votar" title="Votar esta anotación en Bitacoras.com" style="vertical-align:middle;border:0" /></a>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-39074243585289937252011-01-07T11:43:00.010+01:002011-01-19T22:38:54.430+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (8)<div align="justify"><strong>Jerry Goldsmith</strong><br /><br />A Jerry Goldsmith tuve el placer de disfrutarlo en los ciclos dedicados a música de cine que cada año se celebraban en Sevilla. Al igual que Elmer Bernstein, Howard Shore (al que ya dediqué una entrada hace tiempo), Michael Nyman...; Goldsmith llenó con su música dos días que recuerdo de manera muy especial. El primero de ellos lo dedicó a dirigir un repertorio de su música y el segundo a interpretar las partituras de otros compositores, entre los que se encontraban Bernard Hermann o John Williams.<br /><br />Evidentemente Goldsmith no es un autor exclusivo del cine fantástico y brilló por igual en todos los géneros, aunque para aquel consiguió con sus partituras elevarlo a un ranking más alto, no sólo de popularidad, sino de calidad. Muchas de las piezas que a lo largo de su filmografía llenaron de música las imágenes del cine fantástico y de terror han pasado a la posteridad como momentos innovadores que fueron el inicio de cientos de partituras que las imitaban, así recuerdo la suavidad de “Alien”, llena de misterio y momentos escalofriantes, o la tan imitada partitura para “La profecía”, con el inicio de los coros satánicos que tanto soporte ha dado al cine de terror posterior.<br /><br />Jerry Goldsmith compuso más de 250 bandas sonoras, incluyendo ya en la cima de su carrera trabajos para series “B” que poco o nada aportaban a su carrera. Para unos una muestra más del talento del compositor, de su capacidad creativa y de su no sometimiento a las cadenas del triunfo, para otros el ejemplo de que no todas las obras eran suyas y de que para estas películas contaba con un equipo de compositores que al estilo de los viejos talleres de pintura, componían estos scores. Yo me quedo con la primera teoría, quizás porque se acerca de forma más romántica a la trayectoria de este gran compositor.<br /><br />Goldsmith empezó componiendo al final de los años 50 partituras para series de televisión y “weterns” de serie “B”. Incluyendo a principios de los 60 varios episodios de “En los límites de la realidad”. Tras producciones bélicas y del Oeste en los primeros años de esa década, se interna en la ciencia ficción con “The Satan Bug” (1965) y “Plan diabólico” (1966). Sin embargo su gran producción para este género llega en 1968 con “El planeta de los simios”, donde la música se hace estridente, átona y llena de contrastes, para reflejar la paradoja del film. Después realizaría la música de algunas de las siguientes partes de este planeta y seguiría en el campo de la ciencia ficción con “La fuga de Logan” (1976).<br /><br />En el terror entraría de la mano de “Satán, mon amour” (1971), “El otro” (1972) y “La reencarnación de Peter Proud” (1975). Aunque su éxito más sonado y la coronación como el “compositor del terror” llegaría con “La profecía” (1976), donde la música corona los momentos más terroríficos de la película con los citados coros, para posteriormente bajar la intensidad con excelentes momentos sinfónicos que dan una tregua al espectador. Aquí pongo los dos ejemplos más notables y conocidos de la película (ambos imitados hasta la saciedad). Realizaría también la música de las dos posteriores secuelas.<br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=3e5fb3c" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/newTFuH-5dM&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/newTFuH-5dM&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />Continúa con la ciencia ficción en “Callejón mortal” y “Capricornio uno” ambas de 1977, “Coma” (1978), “Los niños del Brasil” (1978) y “Star Trek, la película” (1979). Se apunta al cine de catástrofe de los 70, con un toque de terror, en “El enjambre” (1978). De nuevo le llega el momento de otra de sus grandes partituras, la realiza para otra película de terror, “Alien, el octavo pasajero” (1979), donde el horror se vive en cada uno de los pasadizos de la solitaria nave, descrito con inteligencia y maestría por Goldsmith.<br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=435298d" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />En los ochenta continúa con la ciencia ficción, “Atmósfera cero” (1981) y de nuevo el éxito le llega con otra producción de terror, “Poltergeist” (1982), película en la que en los títulos de crédito aparece como director Tobe –“La matanza de Texas”- Hooper, pero que en realidad dirigió su productor, Steven Spielberg, que por desavenencias con Hooper terminó dirigiendo él mismo la película. De nuevo la maestría de Goldsmith queda por encima de las imágenes en esta maestra banda sonora. Y como no podía ser de otra manera también puso música a sus secuelas.<br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=34a1735" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Posteriormente daría música a la segunda parte de “Psicosis” (1983), 23 años después de Herrmann, “En los límites de la realidad” (1983) y una de superhéroes, “Supergirl” (1984). De nuevo otra película de terror para adolescentes “Gremlins” (1984) y su secuela, le hacen merecedor de la fama. Música rápida y divertida, con todos los toques Goldsmith, ya famosos por aquella época.<br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=27df1a6" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />En los 80, su época de mayor producción en este campo, seguiría componiendo con más o menos fortuna música para el cine fantástico, “Runaway” (1984), “Baby, el secreto de una leyenda perdida” (1985), “Exploradores” (1985), la genial partitura para “Legend” (1985), “Link” (1986), “El chip prodigioso” (1987), “Leviathan” (1989), “Warlock” (1989) o “Star Trek V” (1989).<br /><br />Los 90 comienza con una superproducción de ciencia ficción, “Desafío total” (1990), donde de nuevo el talento de Goldsmith destaca en una producción sinfónica, llena de contrastes y de maravilloso acompañamiento para las imágenes de Verhoeven. Sin embargo mucho más melódica es su música para “Eternamente joven” (1992).<br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=65acff9" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=111930e" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Otros títulos de género fueron “Matinee” (1992), “La sombra” (1994), “Powder” (1995), “Deep Rising” (1998), “La momia” (1999), “The haunting” (1999) o “El hombre sin sombra” (2000).<br /><br />Goldsmith permanecerá siempre en la memoria de los amantes de la música de cine, de la magistral, de la que llena de verdad, por su lirismo, emoción, épica y grandes momentos que nos ha hecho vivir. Es el gran nombre de la banda sonora.<br /></div><br /><br /><a href="http://bitacoras.com/anotaciones/ http://elsuenodelandroide.blogspot.com/2011/01/musicos-del-miedo-de-la-a-la-z-8.html"><img src="http://widgets.bitacoras.com/votar/normal/ http://elsuenodelandroide.blogspot.com/2011/01/musicos-del-miedo-de-la-a-la-z-8.html" alt="votar" title="Votar esta anotación en Bitacoras.com" style="vertical-align:middle;border:0" /></a>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-69071434968330073602010-12-27T15:37:00.000+01:002010-12-27T15:38:31.327+01:00NUESTRO SALVADOR<div align="justify">-Una semilla en esta tierra desolada, la nueva savia que salvará a nuestra patria –así definió el general su golpe de estado.<br />-¿Se respetarán los derechos y libertades individuales en esta nueva etapa? –continuó preguntando el periodista.<br />-Claro que sí –contestó el general.<br />-¿Y habrá libertad de opinión?<br />-Por supuesto, mientras no se atente contra la nueva doctrina imperante. Simplemente se deberá pasar el filtro informativo.<br />-¿Y en qué consistirá ese filtro?<br />En ese momento el general hizo un gesto a dos soldados que se encontraban frente a él. Con pulso firme sujetaron al periodista sacándolo por una puerta lateral. La habitación quedó en silencio.</div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-29607401684691386592010-11-10T21:32:00.001+01:002010-11-10T21:36:38.289+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (7)<div align="justify"><br /><strong>Fabio Frizzi<br /></strong><br />Músico italiano que realiza composiciones para películas de serie B, como “Nueva York bajo el terror de los zombi”, “Miedo en la ciudad de los muertos vivientes”, “Manhattan Baby” o esta, “El más allá”. Dedicado últimamente a la televisión.<br /><br /><object height="344" width="425"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/WOFFz13D65w&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowscriptaccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/WOFFz13D65w&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br /><br /><strong>Philip Glass<br /></strong><br />Con la música para los documentales “Koyaanisqatsi” y “Powaqqatsi” (Glass comenzó y continúa en este campo) conquistó una fama que debo reconocer la vi en un principio injusta. Tonos minimalistas, opresivos en muchas ocasiones, que me hacían recordar al peor Michael Nyman. Sin embargo con el tiempo, quizás después de acostumbrar mis oídos, o de entender mejor el mensaje de su música, debo confesar que es uno de los autores que sigo.<br /><br />Su música no podía quedar apartada del “fantástico”. Sus tonos oscuros y agobiantes cuadraban a la perfección con este cine. Y así fue como de la mano de Soavi presenta la música para “El engendro del diablo” ( hay que pensar que detrás está Darío Argento). Aunque su consagración en el cine de terror le llega con Candyman (intentaré no pronunciarlo más veces...) y más tarde con su secuela.<br /><br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=0dcf0b4" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Más tarde realiza una composición para el Drácula de Browning, llena de música sugerente y simbólica. La composición más lograda para el cine la realiza para “Las horas”. Una de sus últimas y mejores composiciones la escribe para “El ilusionista”.<br /><br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=344e308" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><br /><strong>Goblin<br /></strong><br />Banda de rock italiana que está unida indefectiblemente al nombre de Darío Argento, el padre del terror moderno. Como el director, tiene sus detractores más implacables, ¿pero acaso una película de Argento podría rodar con otra música?<br /><br />Para este construye las bandas sonoras de “Rojo oscuro”, “Suspiria”, “Tenebre”, “Phenomena” o “Insomnio”y para la producción de Argento a Romero “Zombi”. Una curiosidad, el compositor Claudio Simonetti estuvo en esta banda.<br /><br /><object height="385" width="480"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/IQ89AybKVvs?fs=1&hl=es_ES&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowscriptaccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/IQ89AybKVvs?fs=1&hl=es_ES&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="480" height="385"></embed></object><br /><br /><br /><strong>Elliot Goldenthal<br /></strong><br />Goldenthal un músico atonal y en ocasiones con unas composiciones que por lineales resultan algo aburridas logra recrear ambientes que cuadran a la perfección con los objetivos de sus películas, sobre todo en el campo del fantástico. Su primera incursión en el terror llega de la mano de Stephen King, recreando la música de una de sus mejores novelas junto a “El resplandor” (el tema de los Ramones para la película es de mis favoritos).<br /><br /><object height="385" width="480"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/DsJywT0CQbk?fs=1&hl=es_ES&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowscriptaccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/DsJywT0CQbk?fs=1&hl=es_ES&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="480" height="385"></embed></object><br /><br />Para Fincher hace la música de una película que no me gustó la primera vez que la vi, pero que en el segundo visionado (quizás porque vi un montaje realizado por el propio director), me enganchó. Se trata de Alien 3, y su música invade de extrañas sensaciones la opresiva cárcel fortaleza espacial llena de alienígenas.<br /><br />Sin embargo su consagración definitiva en el mundo del fantástico y de la banda sonora le llega con la magistral “Entrevista con el vampiro”, sugerentes coros, música íntima y suave, hacen que la película recree el ambiente “vampírico-romántico” que tan de moda está ahora.<br /><br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=9eae37e" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Varios Batman, “Esfera”, la música para el fallido film de Jordan, “In Dreams” y “Final Fantasy” son algunas de sus composiciones para el género.</div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-22155633262606033232010-11-03T19:18:00.000+01:002010-11-03T19:20:03.406+01:00EL MISTERIOSO CASO DE LOS PENDIENTES DE ORO<div align="justify">Marta Moreti leía el periódico en el salón de su casa, sentada frente a la ventana, las arrugas de su octogenario rostro se dibujaban en su blanca piel como las ondulantes dunas de una playa. Su pequeña nariz se contrajo, como si en la noticia hubiese olido el misterio. Su viejo olfato de sabueso no había perdido el poder de intuir el intenso olor del rastro criminal. El titular anunciaba: “Extraño asesinato en Parla”. Marta lo leyó con avidez. Un joven es encontrado muerto en el interior de un coche. Todos los indicios apuntan a un asesinato, pero no hay señales de violencia, ninguna huella dactilar, ni siquiera de pisadas en el exterior del enfangado campo. Únicamente las marcas de los neumáticos del vehículo allí estacionado. Sin embargo en el cuello del joven aparecieron unos pequeños rastros circulares que indicaban una acción exterior. Marta levantó su cansada vista del papel impreso mientras su mente se llenó de imágenes de un lejano pasado que acudieron a ella como una historia vivida el día anterior.<br /><br />A su primera gran investigación la prensa la bautizó como el “caso épsilon”, aunque Marta conocía la historia mejor que nadie, pues vivió en primera persona el terrible asesinato de Virginia de Soto y su desenlace. De hecho fue asediada por la prensa los días siguientes a que su nombre saltara a las columnas de los diarios. Prensa, televisión y en general curiosos, se acercaban hasta la calle Huertas a la espera de encontrársela. Aquel caso le granjeó una notoriedad que le resultaba molesta, pero que cambió para siempre el resto de su vida, no sólo en lo profesional, si no también y sobre todo en lo personal.<br /><br />Y el siguiente paso en su carrera de detective le llegó enseguida. Con el extraño caso de los pendientes de oro, que ahora acudía fresco y reciente a su mente al leer la noticia en la prensa. Con él Marta descubrió que su ingenio y su intuición siempre habían estado latentes dentro de ella, pero ahora se habían afilado como incisivos cuchillos. Aquel fue su licenciamiento definitivo en el oscuro mundo de los casos criminales.<br /><br /><br /><br />Acababa de regresar de las vacaciones en Canarias junto a su madre. Debía ser finales de agosto o principios de septiembre. Los nombres de Ricardo, Emi o Virginia todavía bailaban en su cabeza dibujando extraños mensajes. Sin embargo la tranquilidad de aquellos días habían rejuvenecido no sólo a su cansada madre, sino que habían revitalizado su cerebro como si hubiese recibido una descarga de energía positiva. Pese a la notoriedad que le había dado el caso épsilon, Marta intentaba recuperar una normalidad que le pedía su sentido común. Vuelta a los desayunos en el “Sueño” y a la cotidianeidad de su oficina.<br /><br />Fue precisamente en su apartamento de trabajo donde nuevamente una visita rompió el comienzo del día. Marta recordaba la cara de la mujer cuando entró por la puerta, a su mente acudieron los antiguos temores de Blanca, porque la mujer lloraba de forma abundante y desconsolada. Se llamaba Ángela y su rostro de mediana edad se contraía por las emociones del dolor.<br />-Tiene que ayudarme- le dijo con angustia a Marta, sentada frente a la mesa de su despacho.<br />-Cuéntemelo todo, por favor- fue lo único que acertó a decirle en aquellos momentos, todavía presa de los sentimientos revividos de su último caso.<br /><br />Habían asesinado a su anciana madre. Ángela con la voz entrecortada por la fuerte emoción narró a Marta como la encontró el día anterior postrada en la cama, inerte, con las huellas visibles en su cuello de haber sido estrangulada. Todo a su alrededor estaba revuelto, los cajones y armarios abiertos, la ropa tirada por el suelo y los objetos más valiosos sustraídos.<br /><br />-¿Todos?- recordaba Marta que la interrumpió con la pregunta.<br />-¿Cómo dice?- le preguntó Angela con una curiosidad que había ganado al llanto durante un breve instante.<br />-Sí, que si habían desaparecido todos los objetos más valiosos.<br />-Incluso los que mi madre mantenía más ocultos- fue la respuesta que dejó satisfecha a Marta y que abrió un pensamiento en su mente.<br /><br />Aceptó el caso de inmediato y le pidió ver la casa de su madre esa misma tarde. Ángela le dijo que no la podía acompañar, pero que se lo diría a su hijo para que la llevase. Marta se despidió de la destrozada hija con una profunda reflexión de comprensión, pero también de ligero temor, habitando en su mente. Pero antes de que se marchase Marta le hizo una última pregunta.<br />-¿Alguien tenía llaves de la casa de su madre?<br />-Únicamente yo y siempre las llevo encima. Me decía que con tanta sofisticación de blindaje si un día se quedaba fuera ningún cerrajero del mundo podría abrir la puerta.<br /><br />A la hora señalada se presentó el nieto en su casa. Se llamaba Daniel, un joven de unos veinte años, apuesto y muy educado, como pudo comprobar posteriormente Marta. Se dirigieron a la casa de su abuela en el viejo Astra. Las indicaciones del joven la llevaron hasta Alcorcón, a los pies de un alto edificio de doce plantas.<br />-Aquel es, el séptimo de la esquina- dijo Daniel señalando con su mano- Marta observó con sus penetrantes ojos el entorno. Una pared lisa imposible de escalar, ni de descender, demasiada altura para entrar por la ventana de la fachada.<br />-¿La ventana de su habitación es la que está abierta?- le preguntó Marta.<br />-Sí, mi abuela siempre fue muy calurosa y dormía con las ventanas abiertas- Marta se fijó que la casa de al lado tenía las persianas echadas.<br />-¿Quién vive junto a tu abuela?<br />-Nadie. La casa lleva vacía más de veinte años.<br /><br />Marta subió a ver el piso, aunque en realidad fue a cerciorarse de otras cuestiones. Comprobó que no había patio interior, que en el descansillo sólo había dos viviendas y que la puerta de entrada al edificio permanecía abierta porque el telefonillo no funcionaba, aunque afortunadamente el ascensor sí.<br /><br />Los recuerdos de la noche oscura, sin luna, aparecían recientes en la memoria de Marta. Con una potente linterna en sus manos se dirigió al domicilio de la anciana, pero no fue esta puerta la que forzó. Con sus ganzúa se afanó en la cerradura de la puerta contigua. La última que abrió de esta manera fue la de Toni y el recuerdo en aquellos momentos no acudió de forma agradable, como tampoco el pensar en el apartamento de Carmen. Sin embargo el olor que inundaba aquella casa era a cerrado, a suciedad acumulada por el paso de los años. El foco alumbró el suelo, una inmensa capa de polvo que se coloreaba blanco como la nieve al contacto con el haz de luz. Pero ni una sola huella de pisada, nada que indicase una cercana presencia humana en el tiempo. Buscó el interruptor de la luz, pero tras pulsarlo varias veces comprobó que la casa permanecía en la oscuridad.<br /><br />Iba a dar la vuelta para irse cuando su luz chocó contra algo que le lanzó un pequeño destello. Volvió a alumbrar a lo lejos, en el salón, a los pies de la ventana cerrada. El brillo se hizo más intenso. Se acercó hasta el salón para comprobar que eran dos objetos, concretamente dos pendientes de oro con forma de aro. Su potente brillo indicaba que habían sido depositados allí recientemente, sin que el polvo hubiese dado cuenta todavía de su pulida superficie. La extrañeza se apoderó de Marta, un suelo sin ninguna pisada y allí en medio de la nada unos pendientes de oro. Los recogió con un pañuelo y los metió en una bolsa de plástico.<br /><br />Pero el misterio lejos de disminuir se hizo más sólido cuando junto a sus pisadas, y tras barrer con su linterna el suelo, descubrió sobre el polvo unos pequeños círculos paralelos que iban desde la entrada a la ventana. Sin pensarlo dos veces sacó su cámara para fotografiar aquellas extrañas huellas. En su mente se proyectó la imagen de un angel que con patas de palo hubiese pasado por allí dejando caer su áurea carga en el suelo.<br /><br />Regresó a su casa y se metió en la cama con la incertidumbre, pero con la gestación de una idea en su cabeza se durmió aquella noche.<br /><br />Cuando su amigo Miguel al día siguiente le dio los resultados de los análisis sobre los pendientes no le extrañaron en absoluto las conclusiones.<br />-Ni una sola huella, además la hija nos ha confirmado que pertenecían a su madre- le dijo Miguel-. ¿Y esta vez me explicarás dónde encontraste los pendientes de la fallecida?<br />-Mañana te lo diré sin falta, de echo seguramente te necesitaré para realizar un arresto.<br /><br />Envuelta en un torbellino de sensaciones, inundada de frenesí por el posible descubrimiento e iluminada por una luz que se había encendido dentro de ella, acudió al domicilio de Ángela. Allí la recibió su hijo Daniel que le dijo que su madre había salido. Marta con el pretexto de que necesitaba una documentación sobre su abuela, esperó en la cocina a que el nieto buscase los papeles que le había solicitado. Con un poco de plastilina hizo el resto.<br /><br />Al día siguiente Marta acudió otra vez al domicilio de Ángela, pero esta vez acompañada de Miguel. Le alegró que nuevamente la madre no estuviese y fuese el joven el que los recibiese. Pudo notar como en la cara del chico se reflejaba un miedo que no podía ocultar y que el día anterior no había asomado a su rostro.<br />-Bonitas banquetas- le dijo Marta.<br />-¿Cómo dices?- le preguntó extrañado Daniel.<br />-No le demos más vueltas. El misterio sólo ha durado unas pocas horas- sin esperar una respuesta del chico y ante la atenta mirada de Miguel, la detective continuó hablando-. Tú sabías perfectamente donde guardaba tu abuela todas sus joyas y objetos de valor, incluso me imagino que sólo a tu madre y a ti os confiaría sus escondites más secretos por si le pasaba algo. El problema era como entrar en la casa, aunque la respuesta pronto acudió a tu mente. Había que crear un gran misterio, ¿verdad?, forzar la cerradura de tu abuela era una tarea simplemente imposible, por lo que entrar por la casa del vecino sería lo más apropiado y fácil..., parecería que un angel hubiese entrado volando por la ventana de tu abuela.<br />-¿Y acaso han encontrado huellas mías en el piso del vecino?<br />-Técnicamente son huellas tuyas, aunque no de tus pies, si no de tus banquetas. Acudiste por la noche con estas dos al domicilio de tu abuela –señaló los dos taburetes que estaban bajo la mesa-. Las huellas que tomé ayer de la base de las patas coinciden con las huellas dejadas en el polvo en casa del vecino. Abriste la cerradura, fácil, pues una casa vacía no tendría un gran sistema de cierre. Para no dejar huellas de tus pisadas fuiste avanzando de una banqueta a otra hasta llegar a la persiana. La abriste y accediste al dormitorio de tu abuela. Este era el paso más difícil, pero eres un chico ágil y los escasos centímetros que separaban las ventanas no fueron obstáculo para ti. En su cama la asesinaste, cogiste todos los objetos de valor de los lugares que ya conocías y revolviste la habitación para simular un registro En todo momento actuaste con guantes, porque ninguna huella se ha hallado en la casa.. Volviste nuevamente por la ventana abierta a casa del vecino, cerraste la persiana y en la oscuridad no te diste cuenta de que unos pendientes de oro de tu macabro botín se deslizaron hasta caer al suelo. Misterio resuelto- terminó sentenciando Marta.<br />-No quería matarla- dijo Daniel llorando-. Se despertó y me vio allí de pie... tuve que asfixiarla...- ahora su llanto se convirtió en un profundo sollozo.- Debía dinero, tenía que pagarlo o me matarían...<br /><br />En ese momento el joven intentó escapar corriendo, pero las manos de Miguel lograron alcanzarlo por la cintura y retenerlo contra la pared.<br /><br />-En pocos días Ángela ha perdido una madre y un hijo- fueron las palabras de Marta.<br /><br /><br /><br />Estas últimas palabras resonaron en su mente, mientras el sol de la mañana iluminaba su rostro. Unas pequeñas lágrimas rodaron por sus arrugas devolviendo a su piel un brillo que hacía tiempo había perdido. Inundando sus ojos de unas lágrimas que la hicieron atravesar el recuerdo en un viaje temporal al que regresaba con asiduidad. Siempre mientras leía el periódico.</div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-14328850737241034532010-10-01T23:35:00.004+02:002010-11-17T11:47:44.487+01:00ÉPSILON EN ROJO<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4KpuMzXHQzQJmCg461eD_EK2UklyLllOTqQqNVBr4pXAOdVAOmAxz2gTVKw86lTcs1b4V_jZv_8P18SsNZ44xyPAnML2Fwq7yVUE8TxP2ZjIYD9-JVgYIvFpzEnbX-VRF5sbbRulqzhYI/s1600/Epsilon+en+rojo2.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5523195272523443106" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 300px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj4KpuMzXHQzQJmCg461eD_EK2UklyLllOTqQqNVBr4pXAOdVAOmAxz2gTVKw86lTcs1b4V_jZv_8P18SsNZ44xyPAnML2Fwq7yVUE8TxP2ZjIYD9-JVgYIvFpzEnbX-VRF5sbbRulqzhYI/s400/Epsilon+en+rojo2.jpg" border="0" /></a><br /><div align="justify"><em>“Una joven de 16 años aparece brutalmente asesinada en una calle de Madrid. La detective Marta Moreti es contratada para investigar el crimen. Lo que al principio se presenta como un importante reto en su carrera, se irá convirtiendo paulatinamente en una pesadilla, en la que Marta irá dejando al descubierto un mundo de marginalidad, mentiras y muerte escondido bajo la máscara de falsos convencionalismos.<br /><br />Crimen, corrupción política y vidas ocultas se dan cita en esta novela policíaca, donde deslizarse en su interior puede suponer estar más cerca de la muerte de lo que nunca nadie se pudo imaginar, caer en un abismo en el que la luz nunca llega a iluminar”</em>.<br /><br /><br /><br />Cuando terminé “El ladrón de sueños”, allá por mediados de septiembre de 2009 ya comencé a idear la trama de mi nueva novela. Con mi experiencia, escasa, y las críticas, siempre bienvenidas, de mis amigos, empecé el boceto de lo que sería la novela que ahora presento.<br /><br />Debía desarrollar los personajes con una mayor complejidad, hacer que la trama fuese más descriptiva y al servicio de la historia, había que unir todos los retales que iba creando para que la narración no se resintiese.... en definitiva, debía elaborar todo mucho más. De la poca experiencia que había adquirido con mi anterior novela y los escritos del blog había sacado una conclusión, antes de ponerme manos a la obra, debía realizar un boceto de historia y personajes que fuesen un fuerte armazón argumental a seguir.<br /><br />Y lo primero, ¿qué historia me apetecía escribir? Pues aunque la novela era policíaca, no pensé en este género hasta avanzar mentalmente en la línea argumental de la trama. Quería hacer una fotografía, ya trasladada a la época actual, de la hipocresía y la falsedad. En principio pensé en un drama, pero luego la idea de la novela negra prendió como una mecha encendida, ¿por qué no intentarlo? Así me puse a inventar personajes, el principal debía ser una mujer detective, y su nombre Marta Moreti, algún día contaré su origen. Una persona normal, sin una inteligencia racional y observadora como la de Sherlock Holmes, sin la experiencia de Marlowe, sin la perspicacia de Maigret,... sino una persona que fuese humana, como si a ti o a mi nos ponen a investigar un caso de asesinato. Un ser humano con sus impresiones y depresiones, con su angustia y su fuerza, vamos, como la persona que podemos encontrarnos en el metro, en la cola de la carnicería o nuestra compañera de trabajo.<br /><br />El resto de personajes tenían que girar en torno a la figura de Marta, auténtica heroína y epicentro de la novela, pero sobre todo de la vida. Así aparecen su amigo Miguel el policía, Emi, Ricardo, el concejal Marco Casares, Lola, Toni,... y un largo etcétera de personajes que hacen que haya historias que se crucen, aunque al final todas convergen en la de la protagonista, reforzando su investigación, que al final no es otra que la de la existencia propia (o por lo menos pretende serlo).<br /><br />Con tantos personajes, la narración daba para seguir líneas argumentales complementarias, paralelas y siempre descriptivas de la principal, lo que me llevó al inicio a tener escritas casi 10 páginas en “word” entre características de personajes y los apuntes de la trama por capítulo y subcapítulo. Ahora sí, me puse a escribir y comencé a llenar páginas, una tras otra se iba completando la acción, los personajes iban naciendo para luego crecer, la trama iba envolviendo como una tela de araña a todos los actores de la obra para hacerlos vivir una vida que consciente o de una forma negada por los mismos no es la que hubieran pretendido antes de comenzar la novela, pero que les lleva a descubrimientos más allá de la propia trama policial. Como pensaba Marta ya en la parte final del libro, de su historia:<br /><br /><em>“Todos los momentos de alegría que había visto esa noche, las risas, los regalos,... en definitiva el envoltorio de la vida le parecía sólo eso, la cobertura. Porque Marta pensaba que nadie miraba en el interior, todos se fijaban sólo en el papel de regalo, sin ver que dentro no había nada. Pero ella sabía aquella noche que el lado oscuro de la ciudad se encontraba en su interior, aquel que la luz de sus calles no lograba despertar al alma dormida. Y ella sabía que sería feliz, sólo tenía que esperar al momento adecuado. Cuando la luz de la ciudad nos despierte”.<br /></em><br />Marta, como Howard en “El ladrón de sueños”, ve como de forma inexorable se ve absorbida por un destino del que no puede escapar, aunque parezca por momentos que tampoco lo intenta o quizás no tenga la fuerza para ello, pero lo único cierto es que el futuro está escrito y lo único que pueden hacer los personajes es intentar nadar en una corriente que en todo momento les es adversa.<br /><br />Manejando situaciones, acciones, personajes, diálogos.... uno se siente como quien maneja los hilos de una función de títeres. Recuerdo que durante este año transcurrido había momentos en que las ideas llegaban en tropel a mi mente, me paraba donde estuviese y tomaba notas para el desarrollo de la obra, ya fuese en un papel, en el móvil, en el ordenador... Sin embargo había otros momentos en que paraba voluntariamente, colocaba a todos los personajes juntos y les asignaba nuevamente el papel que debían desempeñar, ordenaba las ideas y volvía a la carga con mi pequeño ordenador....en el Starbucks, en mi casa, en la playa, en Sevilla, en el AVE..., cualquier sitio era bueno para seguir con la vida de Marta.<br /><br />Ahora, quinientas y pico páginas después, un título que evolucionó de “Cuando la luz de la ciudad nos despierte” al actual, infinitas e interminables revisiones, un trabajo personal muy elaborado, con muchas horas de dedicación, pero con un disfrute también equivalente, os he dejado a Marta Moreti para que conozcáis un trozo de su vida, quizás el más angustioso de su existencia, pero una narración que debía contaros. Ahora está en vuestras manos, vosotros decidís si os gusta lo que os cuento o no, si os parece interesante lo que a Marta le sucedió. Porque ahora Marta Moreti es de todos...<br /><br />Por cierto, no hace falta que os explique por qué hacía tanto tiempo que no escribía en este blog...., espero poder remediarlo. Aunque ya estoy trabajando en la trama de mi próxima novela....<br /></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-211018304708185502010-03-22T23:17:00.000+01:002010-03-22T23:19:25.586+01:00CIVILIZACIÓN DECADENTE-“¡Imbéciles!” -exclamó el hijo mientras leía el “Virtual News”-. Por fin estrenan el concurso, en enero del próximo 2035. Quince participantes recluidos en una isla deberán ir exterminando al que demuestre en las pruebas un coeficiente intelectual más bajo.<br />-¡Civilización decadente! –exclamó el padre-. Dónde han quedado aquellos magníficos programas culturales de principios de siglo, en los que todos se metían en la vida de todos, donde famoso era el que insultaba con más destreza... Y aquellos concursos donde se encerraban a unos jóvenes en una casa vigilándolos constantemente con una cámara. Van a terminar con la televisión.<br /><br />*100 palabras para el concurso “Relatos en cadena”, de la Cadena SERMIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com6tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-88707779536922657582010-02-23T18:20:00.001+01:002010-02-23T18:21:49.857+01:00EL FIN DE LA BATALLA<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEga6amQl6X6HUMIqqQy_MO_grttzDP-BZLTwrg6S5l24j4BMDb6vgo9xK41Cu8YYrlPW_jyx8QyDjrWRQsx1W5XaUY2flBmaCRbA5YxjiKpukprYQ3iYx_67-ZFvZWWxl-iMct_R7CZHWH5/s1600-h/DRAGON+9.jpg"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5441490299370191314" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 316px; CURSOR: hand; HEIGHT: 400px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEga6amQl6X6HUMIqqQy_MO_grttzDP-BZLTwrg6S5l24j4BMDb6vgo9xK41Cu8YYrlPW_jyx8QyDjrWRQsx1W5XaUY2flBmaCRbA5YxjiKpukprYQ3iYx_67-ZFvZWWxl-iMct_R7CZHWH5/s400/DRAGON+9.jpg" border="0" /></a><br /><div></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com16tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-83713029165585154002010-02-14T16:26:00.000+01:002010-02-14T16:29:38.301+01:00APUNTES SOBRE UNA APROXIMACIÓN A UN PENSAMIENTO DE MARTA MORETI<p align="justify">Mientras Marta se dirigía hacia su coche pensaba en el barrio donde vivía, concretamente en la calle Huertas y sin saber por qué su mente voló hasta la descripción de la sociedad decimonónica que hizo Galdós en su novela “Misericordia”.<br /><br />Quizás fuera esa una de las razones que la impulsaron a alquilar su piso en aquella zona, quizás. La novela la había leído no sabía cuantas veces, ¿diez? Y posiblemente se quedaba corta. Una novela en la que Galdós, hasta entonces liberal convencido, parece dar un giro en sus escritos hacia asuntos más sociales, situando al ser humano en el vórtice de una sociedad que él mismo no ha elegido y de la que no es tanto parte, como víctima de la misma. Galdós arroja un cubo de agua fría sobre toda su producción anterior en la que los grandes personajes e ideas (“Episodios nacionales”) son el centro del devenir humano. Allí lo realmente importante en la historia son los grandes momentos de la misma, seres humanos que con sus ideales mueven el mundo. Pero en un momento determinado, el novelista invierte su pensamiento y quiere observar al ser humano que vive estos cambios...y cuando lo hace surge el compromiso social.<br /><br />Galdós, como en su momento hizo Dickens, se da cuenta que el motor del mundo no lo conforma tanto una persona, un líder, como el pueblo que en ese momento vive una transformación, que la acepta y coexiste con ella para que la realidad cotidiana se transforme en historia. Y es cuando Galdós mira al pueblo de su época y ve que los cambios políticos, las grandes decisiones nacionales, dejan su impronta en las personas, que lo viven como pequeños trozos de historia. Su liberalismo (habría que estudiar esta palabra que con raíz en la libertad propugna el no sometimiento de ningún acto privado a las manos del Estado, lo que llevó y llevará a situaciones de total injusticia social) va abriéndose a una visión social (incluso de inicio del socialismo) del pueblo como ente abstracto formado por seres humanos que con unas inquietudes, problemas y aspiraciones individuales se ven muchas veces arrastrados y aplastados por la apisonadora de un Estado que aferrado a ideales político-económicos ha vuelto su cabeza a los problemas del pueblo.<br /><br />A Marta le vinieron a la cabeza correspondencias con situaciones actuales y pensó que el cambio de pensamiento que se elaboró en Galdós sería tildado hoy, de una forma simplista, como de escritor de derechas que se pasa al bando de la izquierda. Estaba a sólo unos metros para llegar a su coche cuando otra idea le vino a la cabeza, y fue la de que hoy en día se produce el fenómeno contrario, el de escritores, pensadores o políticos de pensamiento con una fuerte base social que con el tiempo han derivado a pensamientos más o menos conservadores. Escritores de renombre que nos escribieron sobre espadachines, cultura oriental o nos querían hablar de su libro, se les ve en medios de comunicación de cierta tendencia ideológica, tendiéndoles sus letras y sus pensamientos como puentes con el lector o televidente. Marta estaba llegando a su coche cuando le surgió una pregunta, ¿realmente cambiaron su ideología, o simplemente rentabilizaron el acercamiento a poderosas fuerzas de comunicación?<br /><br />Marta giró por una calle a la izquierda y vio su coche aparcado, junto a él había varios jóvenes que...(pero esta es otra historia)(1).<br /><br />(1) N. del A. Se de buena tinta que este es el pensamiento que acudió a la mente de Marta en esta parte del libro (sería en el Capítulo V, en la parte 7), y que aunque no aparece en el mismo, sí que cruzó por su mente. Muchas son las cosas que le habían sucedido y otras más las que le acaecerían. Su vida estaba girando 360 grados y de forma inconsciente lo estaba asumiendo, no sin dolor psíquico (incluso como veréis, quien lea el libro, también físico). Ya adelanté un <a href="http://elsuenodelandroide.blogspot.com/2009/11/una-pieza-de-novela.html">sueño de Marta Moreti</a> sobre una anciana, que tiene al comienzo del libro. Por cierto espero que este verano, más o menos, pueda tener terminada la novela. Será policíaca, no al estilo C.S.I., porque las pruebas no serán tan importantes como los resultados que los acontecimientos van produciendo en cada uno de los personajes. Cambios sobre los que ya no se puede volver atrás, sobre los que se van construyendo el día a día con más o menos dolor. Porque en la vida la carretera es de peaje y cada cierto tramo hay que pagar un precio para continuar en la misma.</p>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-35173214079111150712010-02-04T23:21:00.002+01:002010-02-04T23:27:08.585+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (6)<p align="justify"><strong>Danny Elfman</strong><br /><br />Elfman es uno de los grandes nombres de la banda sonora de cine fantástico en particular y de la música de cine en general. Aparte es uno de mis compositores favoritos, de hecho recuerdo una época en que tenía todas sus bandas sonoras, incluso conseguí alguna que otra que estaba descatalogada en la tienda de Paco.<br /><br />El nombre de Elfman va unido al del director Tim Burton, pues casi todas las películas de éste llevan la música de aquel. Haciendo la excepción de Ed Wood donde un sensacional Howard Shore sustituyó a Elfman por desavenencias con el director y la última barroca entrega de Burton, “Sweeney Todd”, película que se mueve en el campo del musical con toques “gore”.<br /><br />Elfman se mueve a la perfección en el cine de Burton, donde su universo, ampulosos decorados y personajes malditos que son incomprendidos por el mundo en el que viven, son mostrados con trepidantes notas unas veces y melódicas en otras, creando el toque de magia que recordamos en todo el cine de Burton. La primera película donde colaboraron fue “Bitelchus”, una perversa fábula adolescente donde Elfman retrata a la perfección al maléfico personaje (encarnado por el actor fetiche de Tim Burton, Michael Keaton). Posteriormente repetirían los tres en “Batman”, con una banda sonora que se alejaba de las típicas de superhéroes para anunciarnos las oscuras y góticas calles de Gotham. También realiza la segunda parte, “Batman vuelve”.<br /><br />Pero sin duda uno de los trabajos más completo del dúo llega con “Eduardo Manostijeras” (es impresionante el inicio con un Vincent Price mítico). Aquí las notas musicales de evocadoras melodías se suceden con otras de desesperación y dolor, conformando una música de una belleza y magia que la hacen, sin duda, una de las mejores bandas sonoras del cine.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=8da9eab" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Decía antes que “Eduardo Manostijeras” era una de las mejores bandas sonoras de Elfman, la otra sin lugar a dudas es la del musical de dibujos animados “Pesadilla antes de navidad”. Esta película no fue dirigida por Burton (su director es Henry Selick), pero se nota su mano en el guión y en la producción, ambas del propio Tim Burton. La banda sonora, la más completa de Elfman, combina su típico score con trepidantes canciones de rock, boggie o swing.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=53fb864" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Otras colaboraciones con Burton son “Mars Attack”, divertida parodia...del mundo, “Sleepy Hollow”, terrorífica puesta en escena de la obra de Washington Irving, “El planeta de los simios”, “Big Fish”, “Charlie y la fábrica de chocolate”, con una música que trae de nuevo los mejores momentos del director y el compositor o “La novia cadáver”, con un formato de cine muy parecido a “Pesadilla antes de navidad”, aunque inferior en resultados (tanto de imágenes como de música).<br /><br />Pero los trabajos de Elfman para el cine fantástico no se reducen a las composiciones para Burton. Una de sus grandes bandas sonoras es para la puesta en imágenes de “Cabal”, la novela de Clive Barker, la película también dirigida por el escritor se llamó “Razas de noche”. Una fábula que se desarrolla en el subterráneo mundo de Midian, poblado por fantásticos seres de pesadilla y marginalidad.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=fa507fc" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Una banda sonora que me gusta mucho es “Agárrame esos fantasmas”, película del director Peter Jackson antes de hacerse famoso con sus Señores del anillo. La música es vibrante y movida, con toques de comedia cuando la acción lo requería.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=e23489d" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Entre los muchos scores que Elfman realiza para el cine fantástico destacan “Darkman” con el antihéroe creado por Sam Raimi, “Men in Black”, “Spiderman”, “El dragón rojo”, con un sensacional score para esta aventura de Hannibal Lecter, “Hulk” o “The Wolfman”.<br /><br />Sin duda Danny Elfman es uno de los compositores más importantes del panorama de la banda sonora actual.<br /><br /><br /><strong>George Fenton<br /></strong><br />Recuerdo que la banda sonora de la película “En compañía de lobos” era un mito, tanto por su casi imposibilidad de conseguirla como por su calidad artística. Porque hoy en día que se pueden conseguir por internet toda clase de músicas y películas resulta raro pensar que hubo una época anterior en que si una banda sonora estaba descatalogada era imposible de conseguir. Este era el caso de esta vuelta de tuerca del cuento de Caperucita roja, “En compañía de lobos”, película de Neil Jordan donde una música intimista y suave daba sus notas a esta fábula llena de escenas oníricas, símbolos y un lenguaje visual impresionante.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=c129473" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Otra gran composición de Fenton la realiza para la enésima versión del Doctor Jekyll, “Mary Reilly”, dirigida por un intimista Stephen Frears, lo que da un nuevo tono a la eterna historia del esquizofrénico doctor.<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/ivkgR0QNdq4&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/ivkgR0QNdq4&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />El resto de obras de este gran compositor británico no se encuadran dentro del cine fantástico, por lo que pese a que tiene magníficas composiciones no voy a citar más bandas sonoras suyas, que como digo las tiene y muy buenas.<br /><br /><br /><strong>John Frizzell</strong><br /><br />John Frizzell no es de mis compositores favoritos, aunque reconozco que tiene sus seguidores y gusta. Hace trabajos para el cine fantástico como “13 fantasmas”, “Ghost Ship” o “La cosecha”, aunque personalmente la obra suya que más me gusta la realiza para la película “Alien Resurrection”</p><p align="justify"> </p><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=a22d965" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-80177527835960703802010-01-19T11:15:00.001+01:002010-01-19T11:17:31.908+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (5)<div align="justify"><strong>Pino Donaggio</strong><br /><br />Todavía recuerdo aquel vinilo que compré sin saber nada de Pino Donaggio. Y lo compré porque en su portada ponía DePalma, por aquella época, tendría entonces unos veinte años, Brian DePalma era uno de mis directores preferidos (aún hoy lo sigue siendo, aunque haya perdido mucha fuerza en sus películas). Además el título del disco (creo que editado por “Milan”) “Love and Menace” era muy sugerente. Incluía temas de películas de DePalma como “Carrie”, “Home Movies”, “Vestida para matar”, “Impacto” o “Doble cuerpo”.<br /><br />La música de Donaggio para DePalma es un compendio de todo lo bueno que tiene este compositor. Su parte más melódica, con preciosos temas de amor, suaves y cálidos combinados con su parte más cercana al cine de Hitchcock y a su compositor Herrmann. No podía ser de otra manera, no sólo porque este último haya sido el compositor más influyente en la música de cine de la segunda mitad del pasado siglo, sino porque una parte del cine de DePalma es heredera directa del cine del magistral director inglés. Películas como “Vestida para matar”, “Doble cuerpo” o “En nombre de Caín” son manipulaciones más o menos afortunadas de “Psicosis” o “La ventana indiscreta” entre otras. De hecho el cine de DePalma tuvo en sus comienzos al Herrman del final de su carrera como compositor de dos grandes películas suyas, “Hermanas” y “Fascinación”.<br /><br />La primera música que Donaggio hace para DePalma es para su película “Carrie”, basada en la famosa novela de Stephen King. Aquí se pueden disfrutar de las dos facetas de la música de Donaggio a la que antes aludía.<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=440cb0a" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=35b01c2" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />En “Vestida para matar” perfecciona su música llegando a excelentes momentos de fuerza y definiendo un estilo que le haría formar con el director americano uno de los tándems más interesantes que haya dado la música de cine.<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/tmiwve40ZPg&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/tmiwve40ZPg&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />Sin embargo Donaggio se dio a conocer en la música de cine con una película tan fascinante e inquietante como, todo hay que decirlo, de amanerado estilismo. “Amenaza en la sombra” es una historia donde los canales venecianos se convierten en un terrorífico laberinto donde la angustia y los miedos del protagonista (fabuloso Donald Sutherland) se manifiestan.<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/XtySaf0bIhQ&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/XtySaf0bIhQ&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />Donaggio que realiza gran parte de su obra para el cine de su país (Italia), ha legado al cine de terror otras partituras para películas como “Piraña”, “Aullidos”, “Los ojos del diablo”, “La secta”...Un autor tan interesante como poco conocido. Sus bandas sonoras se escuchan perfectamente fuera de las imágenes de las películas, lo que en ocasiones redunda, no siempre para bien, en la conexión entre nota musical y fotograma.<br /><br /><br /><strong>Patrick Doyle<br /></strong><br />Incluir a Doyle en un monográfico dedicado al cine de miedo y fantástico no tiene mucho sentido, siendo el compositor de Kenneth Branagh para casi todas sus películas. El mundo de Shakespeare (“Enrique V”, “Mucho ruido y pocas nueces” o “Hamlet”) o de los grandes clásicos (“Indochina” o “Sentido y sensibilidad”) fueron sus dedicaciones más importantes al inicio de su carrera. Hoy es un compositor cotizado dentro de las grandes productoras.<br /><br />Sin embargo, y de ahí la inclusión aquí, dentro del cine de terror tiene una creación que sigue la línea de su carrera, pues entronca con el mundo de los grandes clásicos. Se trata del “Frankenstein” que rodase Branagh, siguiendo fielmente la obra de Mary Shelley (aunque ya se sabe que literatura y cine son afines, pero el medio de expresión requiere de un lenguaje diferente que hace imposible la compatibilidad al 100% de esta afirmación de fidelidad del cine con la obra escrita).</div><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=1e3c763" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-5052834470883800972010-01-12T21:36:00.002+01:002010-01-12T21:40:41.363+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (4)<p align="justify"><strong></strong> </p><p align="justify"><strong>John Carpenter</strong><br /><br />Si siento una debilidad por un compositor de música de cine, éste es John Carpenter. Magistral director de películas de terror que ha compuesto la mayoría de las bandas sonoras de sus películas. Y cualquiera que escuche por primera vez a Carpenter pensará que su música es mecánica, estridente y electrónicamente chillona. Estoy casi de acuerdo, casi, pero tiene algo que hipnotiza, que hace que las imágenes de sus films no se olviden fácilmente. Reconozco que oír su música en la intimidad del hogar supone un acto de cariño hacia el mismo.<br /><br />Porque quitando sus primeras incursiones electrónicas en “Dark Star” y “Asalto a la comisaría del distrito 13” (esta fue la primera película de Carpenter que vi y que me hizo ser un incondicional de sus imágenes), su gran éxito, tanto en su parte fílmica como musical fue “La noche de Halloween”. Para esta película componía unos de los temas más famosos del cine de terror:<br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=1d856a1" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Tras componer varios scores que seguían el mismo patrón de música electrónica para películas suyas como “La niebla”, “1997: rescate en Nueva York” o “Christine” (sobre novela de Stephen King) y películas ajenas como “Sanguinario” (segunda parte de Halloween) o “Halloween 3” se vuelve más versátil en “Golpe en la pequeña China” o “Están vivos” (recuerdo que en el estreno de esta película nos dieron unas gafas como las del protagonistas y quien haya visto esta magistral película sabrá de sus poderes).<br /><br />Pero sus mejores scores vienen para sus siguientes películas. “En la boca del miedo” creo que es sin duda no sólo su mejor película, sino una de las mejores del cine de terror; en ella realiza una gran composición dentro de los márgenes de su música, donde los momentos de horror cósmico, recordemos que sin ser una adaptación de ninguna obra de Lovecraft refleja su personal mundo con una empatía no vista antes en el cine, decíamos que estos momentos tienen una fuerza mucho más inquietante bajo la aplastante música de Carpenter.<br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=f140b6b" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Muy buena su música para “El pueblo de los malditos”, genial remake de la película del mismo nombre de Wolf Rilla de 1960. Me gustan muchos sus títulos de crédito:<br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=561012d" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Otros trabajos suyos son “2013: rescate en L.A.” (segunda parte de “1997: rescate en Nueva York”), “Vampiros” (sin duda otro de sus mejores trabajos) o “Fantasmas de Marte”.<br /><br />Figura clave dentro del cine de terror, John Carpenter debe ser un nombre a reivindicar dentro de la historia del cine. Si en vez de hacer películas de miedo hiciese por ejemplo dramas, los críticos estarían hablando de “cine de autor”, sin duda.<br /><br /><br /><strong>Carles Cases</strong><br /><br />Las incursiones de Carles Cases en el fantástico son escasas y recuerdo la música que compone para las primeras películas de Jaume Balagueró. En “Los sin nombre” (película con uno de los comienzos más inquietantes y escalofriantes del cine de terror) realiza una competente banda sonora propia del género. Escalofrío que continua en “Darkness”, la aventura americana de Balagueró.<br /><br />Compuso también la banda sonora de “Dagón”, la mejor película de la “Fantastic Factory”. Productora española que entre los años 2000 a 2007 intenta revitalizar el cine de terror con un sello personal de producción y con directores propios del género como Brian Yuzna, Jack Sholder o Jaume Balagueró. La sensación final fue de logro parcial de sus objetivos. En esta ocasión de nuevo el director Stuart Gordon hace una versión de la obra homónima de Lovecraft. La música es densa y oscura, como lo son la fantástica belleza de Combarro, pueblo gallego donde se rodó la película (acierto de localización el llevar los mundos de Lovecraft a tierras gallegas).<br /><object height="344" width="425"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/ezijviKZVYM&hl=es_ES&fs=1&rel=0"><param name="allowFullScreen" value="true"><param name="allowscriptaccess" value="always"><embed src="http://www.youtube.com/v/ezijviKZVYM&hl=es_ES&fs=1&rel=0" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br /><br /><strong>John Debney</strong><br />Compositor que se inicia en el campo de la televisión, entra de lleno en los grandes estudios para hacer una música competente, pero que parece enlatada y hecha en serie. Dentro del campo del cine fantástico hace la música para grandes producciones de “terror-para-todos” como “The Relic”, “Sé lo que hicisteis el último verano”, “Komodo” o “El fin de los días”.</p><br /><object height="132" width="353"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=09d787d" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-10104838290107853182010-01-06T22:30:00.001+01:002010-01-06T22:34:27.499+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (3)<div align="justify"><strong>Marco Beltrami<br /></strong><br />A Marco Beltrami lo descubrí con la primera de las partes de “Scream” (luego hizo también las músicas de las secuelas). Película de un creador de psycho killers como es Wes Craven (director de “Pesadilla en Elm Street”), “Scream” explotaba la línea del susto fácil para adolescentes, que tan buenos resultados había dado desde Viernes 13. Es una música para el sobresalto, pero dejaba un hueco para la parte melódica como en su Sidney’s Lament.<br /><br />Luego vino un sueño de pesadilla con Guillermo del Toro y su cucaracha gigante que se desplazaba por los túneles del metro (“Mimic”), con una música de Beltrami al inicio de su estilo, es decir, momentos electrizantes combinados con otros de bello sinfonismo.<br /><br />Empleo instrumental que se desarrolla en los créditos finales de “Mimic”: </div><div align="justify"><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=448c459" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br />Luego su estilo acomodado a los grandes estudios y adaptado perfectamente a las imágenes fue utilizado por otras películas del género como “The Faculty”, “Juego asesino”, el remake de “La profecía”, “The Eye”. Aparte de poner música a superproducciones de género fantástico como “Terminator 3”, “Resident Evil”, “Yo robot” o “Hellboy” entre otras.<br /><br />Genial el tema “Lifeboat” para “Drácula” (2000), recurriendo a los coros, un lugar común en la música de terror:<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/_DTdFc5lmI4&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/_DTdFc5lmI4&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br /><strong>James Bernard<br /></strong><br />Hablar de James Bernard es hablar de la Hammer, la productora británica de cine de terror. Varios son los nombres que hicieron de la Hammer la productora de cine de terror de referencia durante muchos años, desde mediados de los 50 hasta los 70. Nombres como el del productor Enrique Carreras, el del director Terence Fisher o el del compositor James Bernard. Productora que potenció los mitos en decadencia por aquella época de Drácula, Frankenstein, el hombre lobo o la momia. Lanzando al estrellato a actores hoy míticos del género como Christopher Lee o Peter Cushing. Hizo nuevas versiones de clásicos como la del Dr. Jekyll en “El Dr. Jekyll y su hermana Hyde”. Impulsó el cine de ciencia ficción con la serie del doctor Qatermass e incluso hizo cine de aventuras y prehistórico (“Ella”).<br /><br />Estos títulos de crédito son de la película “Las manos del destripador”, no son de Bernard, sino de Christopher Gunning, pero reflejan con particular ejemplo la música hecha para las producciones de la Hammer. Música con tintes góticos, oscura, densa y con maravillosos momentos románticos.<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/_7VSB3OYRxM&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/_7VSB3OYRxM&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />A James Bernard lo descubrí en un disco recopilatorio de música de películas de la Hammer editado por la casa Silva Screen (un sello clásico dentro de la banda sonora como lo son Milan, Varese Sarabande o Intrada). Recuerdo que de aquel disco me llamó la atención los temas de James Bernard para la serie de Drácula.<br /><br />Esta suite para “El poder de la sangre de Drácula” es un compendio de su música, donde los momentos más oscuros y góticos se mezclan (como ocurre en el corte “Funeral en Carpathia” de “Drácula”) con los más bellos de sus partituras.<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/XWOvyCWjrzQ&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/XWOvyCWjrzQ&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />Compositor de base de la Hammer, compone otros temas para films de la Hammer, como las tres partes de la serie de Quatermass, varias de Frankenstein, “She” o “The Devil Rides Out”. Fuera de la Hammer hace una fantástica revisitación de la música de la obra maestra de Murnau, “Nosferatu” de 1922.<br /><br />Bernard como compositor de la Hammer siempre ha sido considerado por la crítica musical como un artesano al servicio de la misma. Desde aquí quiero reivindicar su fuerza y calidad como músico de cine. Creador de las partituras más conseguidas y redondas dentro del género y de la composición musical en general.<br /><br /><br /><strong>Simon Boswell</strong><br /><br />Simon Boswell empezó en el cine italiano de la mano de Dario Argento con “Phenomena”, Lamberto Bava (“Demons II”), Michael Soavi (“Aquarius”) y algunas “explotation” de más baja calidad. Son bandas con mucho sonido eléctrico combinado con música de orquesta.<br /><br />Aunque para mi su colaboración más importante, quizás por lo interesante de la producción del escritor y director Clive Barker, la realiza en “El señor de las ilusiones”. Película compendio de las inquietudes artísticas y culturales de su director. Con un acompañamiento musical duro y eléctrico.<br /><br />Otras bandas sonoras de este compositor son “Santa sangre”, “Fotografiando hadas” o “El demonio del desierto” por citar las más representativas. Su trabajo para la serie “Tin Man” (2007) demuestra una nueva madurez en la creación de Boswell. </div><br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/phiDg5vbN8M&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/phiDg5vbN8M&hl=es_ES&fs=1&rel=0&color1=0x234900&color2=0x4e9e00" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-48792484571781591352010-01-02T15:31:00.001+01:002010-01-02T16:13:43.955+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (2)<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;"><strong>Richard Band</strong><br /><br />Si en la banda sonora del cine de terror, y más concretamente dentro de la serie “B” (e incluso “Z”) hay un nombre friki este es el de Richard Band. Autor prolífico donde los haya, creo que uno de los que más copias piratas ha generado entre los compositores del género. Siempre acompañado por una legión de seguidores que aplauden cualquier composición suya y que editan hasta los ronquidos de éste por las noches.<br /><br />Los mejores momentos de Band se producen de la mano del director Start Gordon y del productor Brian Yuzna (después reconvertido a director) sobre versiones de clásicos de H.P. Lovecraft. Es una música electrónicamente machacona, que en algunos momentos puede llegar a funcionar en consonancia con las imágenes. Su banda sonora más celebrada de este grupo es sin duda la de “Re-animator” película de Gordon sobre obra de Lovecraft (Herbert West, el reanimador de cadáveres, un relato que está fuera de los mitos de Cthulhu), un simpático gore que se deja ver. Pero lo que más llama la atención de esta banda es el homenaje/parodia/plagio que hace de grandes clásicos de la banda sonora.<br /><br />Y como muestra un botón, sus títulos de crédito:<br /><object width="425" height="344"><param name="movie" value="http://www.youtube.com/v/0QBhaiokfw4&hl=es_ES&fs=1&rel=0"></param><param name="allowFullScreen" value="true"></param><param name="allowscriptaccess" value="always"></param><embed src="http://www.youtube.com/v/0QBhaiokfw4&hl=es_ES&fs=1&rel=0" type="application/x-shockwave-flash" allowscriptaccess="always" allowfullscreen="true" width="425" height="344"></embed></object><br /><br />¿Les suena a algo?, claro...a Bernard Herrmann y su obra maestra compuesta para “Psicosis” de Hitchcock, concretamente sus títulos de inicio. En otro corte también copia alegremente a Jerry Goldsmith, exactamente su gran “New Embassador” para la película “La profecía”. Otros scores sobre películas de Lovecraft son “La novia de Reanimator” (secuela de la anterior), Resonator (sobre la novela From Beyond) o “Castle Freak”. Y creo que dentro de la serie “Masters of Horror”, el capítulo que dirigió Gordon “Sueños en la casa de la bruja” también tiene música de Band.<br /><br />La música de Band, salvo excepciones, no suele ser una música tocada por orquesta sinfónica y sus melodías tampoco las pondríamos en una fiesta “chill out”, aunque sí la pincharíamos en una de Halloween, pero ya se sabe que para gustos no hay nada escrito. Otras bandas de este autor son “The day Time Ended”, “Han llegado”, “Terrorvision”, “Shrunken Heads” (aquí los créditos son de Elfman), los “Puppet Master”, “Troll” y un largo etcétera.<br /><br />Este corte es para la película Laserblast:<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=4d1e1f4" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><br /><strong>Roque Baños</strong><br /><br />Roque Baños es junto a Javier Navarrete uno de mis compositores españoles preferidos. Dentro del cine fantástico y de terror destacan varias composiciones suyas por sus suaves melodías combinadas con fuertes momentos de cuerdas a lo Herrmann. El compositor de “La Comunidad” hace un magnífico score para la película “El maquinista” donde el juego de inquietante locura de las imágenes tiene su correspondencia en la música.<br /><br />De la mano del director Jaume Balagueró hace las maletas para cruzar el océano y hacer “Frágiles” junto a éste en Estados Unidos. La película, la más floja del director de “Los sin nombre” y “REC”, está llena de clichés del género y se sostiene en muchos momentos por la música de Baños, que llena la pantalla con su enérgica musicalidad.<br /><br />Este tema de la película es excelente:<br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=095c5f5" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><br /><strong>Tyler Bates</strong><br /><br />Prolífico compositor salido de la última hornada de músicos-para-el-cine, fabrica una música repetitiva y sin personalidad para películas de la misma calidad, por lo que la música no desmerece a las imágenes y viceversa. Entre sus scores están los de las películas “Ultimátum a la Tierra”, “El amanecer de los muertos”, “La plaga”, “Los renegados del diablo” o ésta para el remake de “Halloween” (copiando el leit motiv de Carpenter):</span></div><br /><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=b9e8612" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-33383396562192394702009-12-30T23:34:00.006+01:002009-12-31T00:21:01.867+01:00MÚSICOS DEL MIEDO, de la A a la Z (1)<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">Desde muy pequeño siempre me gustó el cine de terror. Creo que todo comenzó por una prohibición, porque mis padre no me dejaban ver la serie de Ibáñez Serrador “Mis terrores favoritos”. Cuando salían los dos rombos en el ángulo de la pantalla del televisor me mandaban a dormir. Y creo que ahí nació mi afición por este género. Recuerdo que desde la cama oía los diálogos de las películas, su música, y en mi mente se formaban las escenas, al gusto de mi fantasía, claro.<br /><br />Luego vino la primera película de miedo que vi, “El increíble hombre menguante” de un especialista en el género como Jack Arnold. Una fantasiosa historia que ahora que lo pienso, ha podido influir en mis escritos actuales. Un hombre que se ve accidentalmente rodeado por una extraña niebla, va poco a poco menguando de tamaño. Las cosas y animales más insignificantes de esta vida suponen una terrorífica amenaza para el atribulado decreciente que va disminuyendo de tamaño, y como no, con una predestinación ya marcada desde el inicio, termina desapareciendo ¿o fundiéndose con el infinito? Durante su trayecto de cambio sufrirá el tormento y la aflicción moral.<br /><br />A partir de ahí me empezaron a interesar todas las historias de terror que daban en la tele, desde las mejores, como “La novia de Frankenstein”, sin duda alguna el gran clásico entre los clásicos, los ciclos del hombre lobo, Drácula y Frankenstein de la Universal, los terrores en vivos colores de la Hammer, el ciclo de Poe de Corman, las películas de Cronenberg (emitidas en un pequeño ciclo dentro de un programa de Antena 3 que era “Noche de lobos”), los terrores de Carpenter, “La matanza de Texas”, “Al final de la escalera”, “Lobos humanos”, “Alien”, etc. Pero también las peores, por citar las películas de terror de los años 80, que aunque irregulares en su mayoría, conservan cierto encanto.<br /><br />Casi enseguida descubrí que detrás de este mundo del “fantaceluloide” había una música, en muchos casos fascinante, en otros útil sólo para acompañar con efectividad las escenas. Así, recuerdo el primer disco de vinilo que compré, que fue la banda sonora de “Alien” de Jerry Goldsmith. Una música genial, inquietante en los títulos de créditos y terroríficamente descriptiva en muchos cortes. Luego también en vinilo llegaron “La profecía” con el magnífico “Tubular Bells”, “Hellraiser” de Christopher Young y otras tantas más.<br /><br />Años después, y ya en CD, mi colección siguió ampliándose. Recuerdo varias tiendas que existían en Madrid, antes de que internet pudiera con ellas y las cerrara. Concretamente cerca de la calle del Pez estaban Vinilo y Cinescor, esta última regentada por una persona de la que aprendí muchísimo sobre bandas sonoras y que era Paco. Aquel local era un pequeño templo del cine. El recinto era mínimo, con espacio para apenas cuatro o cinco personas (eso si no entraba Santiago Segura, asiduo de la tienda, en su época de mayor volumen). Una vez dentro te envolvía la música de cine que Paco había previamente seleccionado y luego entrabas en debate con los dos o tres fieles parroquianos en la tienda.<br /><br />Dicho todo esto comienzo una serie sobre mis músicos preferidos, en su vertiente del terror y fantasía, con reseñas personales sobre las que se podrá estar o no de acuerdo. Intentaré ser lo más positivo posible, pero lo que si seré es subjetivo, no tanto en los comentarios, que lo serán, como en la elección de los músicos y su música, e intentaré poner cortes de bandas sonoras de ellos. Si no están las mejores bandas será porque no las encuentro en internet, por lo que pondré las que estén y aporten algo a la música de su autor.<br /><br /><br /><strong>Angelo Badalamenti</strong><br /><br />A Angelo Badalamenti creo que lo descubrimos la mayor parte de los aficionados gracias a su música para la serie televisiva de David Lynch, “Twin Peaks”. Una magnífica combinación de ritmos de jazz, blues y el estilo que luego sería característico de Badalamenti. La serie recuerdo que causó furor en su época y que reconozco que la terminé de ver hace poco, porque me hice con las temporadas completas en DVD. Como decía la serie fue el origen de una nueva visión de hacer televisión, y a esta pionera estética contribuyó de una manera muy sobresaliente su música.<br /><br />Y como no sus títulos de crédito:<br /></span><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=5aae46c" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><span style="font-family:times new roman;">De la mano de David Lynch es donde Badalamenti encuentra espacio para sus creaciones más personales, a la vez que geniales. Aunque sin embargo (la película es un drama) el mejor score para Lynch fue para su película “Una historia verdadera”, maravillosa música, un refugio para el alma.<br /><br />Junto a Lynch tiene magníficas creaciones para películas como “Twin Peaks, fuego camina conmigo” (insufrible puesta en escena de los peores ticks de su director), “Corazón salvaje”, “Carretera perdida”, “Mullholland Drive” (donde los personajes de la película se cruzan los actores a mitad de película ¡¿?!) y la especialmente extraña “Inland Empire”. Sin embargo, la banda sonora para “Terciopelo azul”, primera de las colaboraciones con Lynch, es especialmente turbadora. Quizás sea porque la música de los títulos de crédito acompaña a unas imágenes realmente inquietantes, donde la tranquilidad de un pequeño barrio residencial es retratado en cámara lenta y de forma casi esperpéntica, para llegar a un extraño desenlace dentro de la normalidad.<br /><br />Esta es la música en cuestión:<br /></span><object width="353" height="132"><embed src="http://www.goear.com/files/external.swf?file=8693143" type="application/x-shockwave-flash" wmode="transparent" quality="high" width="353" height="132"></embed></object><br /><br /><span style="font-family:times new roman;">Dentro del campo del fantástico una banda sonora que me encanta es la de “La ciudad de los niños perdidos” con música muy personal, combinada con otra melódica y suave. Otras bandas sonoras dentro del terreno fantástico o del terror de este compositor son “Dark Water” o “The Wicker Man”. Al día de hoy el nombre de Badalamenti sigue siendo muy interesante no solo en el mundo del cine fantástico, sino de la banda sonora en general</span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-37667715158563278382009-12-08T20:02:00.002+01:002009-12-08T20:05:09.524+01:00CUENTOS DEL ANDROIDE<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEcpXcqOAkezMZXMxGB-lPzlUk4-AtGM1P_anp7jz9jb4wiEvPA7OLQEpN18PT8nCAU1Vs_XJcpR9hHhDbyV6XEgRypXDkChCgm73EsHuhYzPYk9CHXcvkXDLN_8Q0emeC0yYycXK9__kv/s1600-h/Cuentos+del+androide.JPG"><img id="BLOGGER_PHOTO_ID_5412943388311648946" style="DISPLAY: block; MARGIN: 0px auto 10px; WIDTH: 136px; CURSOR: hand; HEIGHT: 200px; TEXT-ALIGN: center" alt="" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgEcpXcqOAkezMZXMxGB-lPzlUk4-AtGM1P_anp7jz9jb4wiEvPA7OLQEpN18PT8nCAU1Vs_XJcpR9hHhDbyV6XEgRypXDkChCgm73EsHuhYzPYk9CHXcvkXDLN_8Q0emeC0yYycXK9__kv/s200/Cuentos+del+androide.JPG" border="0" /></a><br /><div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">Como dije hace algunos días, he colgado en Bubok un libro con 11 relatos de este blog. Dos más de los que había dicho. Su título es “Cuentos del androide” y para acceder directamente podéis pinchar en este <a href="http://www.bubok.es/libros/19675/Cuentos-del-androide/">enlace</a>.<br /><br />Los relatos los he agrupado por una temática que puede ser personal, en tres grupos diferentes, más un último escrito que no tenía cabida en los otros grupos. Son todos relatos que ya habréis leído en El sueño del androide. La novedad es, que aparte de que está en formato “PDF”,he hecho un pequeño escrito al inicio de cada grupo contando alguna anécdota o la génesis del relato en cuestión.<br />No he querido que en este libro entrasen relatos de Pocol o de Gravedad, pues mi pretensión es hacer un libro para recoger todos los cuentos de Pocol escritos y por escribir, por un lado, y por otro los de Gravedad en otro libro.</span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-814397956415734872009-12-06T00:05:00.001+01:002009-12-06T00:07:05.786+01:00LA CARA OCULTA DE PAPÁ NOEL S.A. (MÁS CUENTO DE NAVIDAD)<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">-¡Hohohoooooo!- gritaba el enorme Papá Noel mientras tocaba una campana. Los niños se arremolinaban a su alrededor dentro del gran centro comercial- ¡Venid niños!<br /><br />Papá Noel se sentó una gran silla con dorados brazos y enormes cojines rojos. Los empleados del centro comercial ponían orden para que todos los niños estuviesen colocados en fila a la espera de que Papá Noel los fuese llamando. Uno a uno iban pasando, se sentaban en las rodillas del enorme Santa Claus y le decían la retahíla de juguetes que querían, desde el primero al último. Unos lloraban, los más pequeños, otros reían, pero todos al final salían con una increíble cara de felicidad. Algunos padres reticentes, sujetaban a sus hijos, eran los que más desconfiaban de la navidad y los montajes de estos centros.<br /><br />-¡Dejad que los niños se acerquen a mí!, que descubran el verdadero espíritu de la navidad. La magia de estos momentos quedará en sus retinas para siempre- decía Papá Noel dirigiéndose a la multitud de padres. Aunque en su mente mercantilista los veía como potenciales clientes<br /><br /><br />Jueves 3 de diciembre, en algún lugar indeterminado de Laponia.<br /><br />Se celebraba el comité ejecutivo de Papá Noel S.A.. En él estaban representadas todas las áreas de la compañía, desde recursos humanos a marketing, pasando por ventas, clientes y el departamento financiero. La presidencia del mismo corría a cargo de su CEO(1), el archiconocido en todos los ámbitos, Papá Noel. Llevaba en este puesto cerca de 100 años y aunque lo habían pretendido otras empresas, su contrato blindado hacía muy difícil su fuga.<br /><br />-Sabéis que nos encontramos inmersos en plena crisis financiera mundial, las ventas han descendido y los beneficios empresariales han seguido la misma línea- dijo Papá Noel mientras todos los presentes asentían con la cabeza a cada aseveración de su consejero-. El director financiero nos ilustrará gráficamente sobre nuestra situación actual.<br /><br />Éste se levantó de su asiento y haciendo una seña a la persona que manejaba el ordenador, empezó una proyección de Powerpoint en la pantalla que todos tenían enfrente. Fue desgranando mediante gráficos como se había pasado de un beneficio de diez mil millones de euros el pasado año a tan sólo nueve mil millones este año. Cuando terminó se volvió a sentar en su silla.<br /><br />-¿Y sabéis lo que significa esto?- continuó Papá Noel, a la vez que todos negaban con la cabeza-, que nuestros accionistas están perdiendo dinero, que nuestra gran compañía puede dejar de ser la preferida entre nuestros inversores –todos asintieron con la cabeza-. Ahora os mostraré la batería de medidas que pondremos en marcha para paliar esta situación- hizo nuevamente un gesto al empleado del ordenador. La pantalla se volvió a iluminar con las fantásticas luces del ilusionismo.<br /><br />-La primera medida será la reducción en la ropa de firmas caras que lleváis –se fue paseando por el lado de cada uno de ellos, nombrando en voz alta la marca de cada uno de los trajes- Gucci, Armani, Versace...a partir de ahora iréis como yo, con el traje tradicional...<br />-...pues a usted le paga Coca Cola por llevar ese traje- dijo una voz al fondo que interrumpió al consejero. Todas las cabezas se volvieron para ver al conserje que traía las bebidas. Las dejó encima de la mesa , se volvió y se fue. La cara de asombro de los presentes era imposible de definir, en todos estos años no había ocurrido nada parecido.<br />-Cuando salgas de aquí lo primero que quiero que hagas es despedir a ése- dijo el consejero acercando su boca al oído del director de recursos humanos.<br />-Sí señor- dijo éste.<br />-La segunda de las medidas –continuó hablando como si nada hubiese ocurrido- será el eliminar los beneficios navideños de nuestros empleados. Concretamente me refiero a suspender la función de circo, eliminar el regalo para los hijos de los empleados y las cestas navideñas de éstos.<br />-¿Y cuál es el ahorro financiero de esta medida, señor?- preguntó el director financiero.<br />-Ya te encargarás tú de darme una buena noticia en cifras, espero- contestó Papá Noel.<br />-Sí señor- dijo éste.<br />-Esta misma mañana sacarás una circular donde la razón de esta medida esté justificada en la crisis financiera y en el mantenimiento de los puestos de trabajo- dijo al director de recursos humanos.<br />-¿La habitual señor?<br />-Sí, claro- dijo el consejero Papá Noel.<br />-Una sola cuestión, el plazo de finalización de la encuesta de satisfacción entre nuestros empleados termina hoy- dijo el director de marketing.<br />-Pues entonces que la circular salga mañana- dijo dirigiendo su mirada nuevamente al director de recursos humanos.<br />-Así se hará señor. Querría añadir sólo una cuestión más, y es que esta medida puede causar un pequeño malestar entre nuestros empleados.<br />-¡Pues que se vayan a la competencia!- dijo con cierta irritación en su voz-, que lo hagan si se atreven. ¿A dónde van a ir, a esas pequeñas empresas familiares, a Los Reyes Magos S.L. o a El Ratoncito Pérez?, ¡que se marchen!, últimamente están en pérdidas.<br />-Sí señor- asintieron todos al unísono.<br />-Esto por lo que respecta a la reducción de costes, pero por otro lado nuestro programa de prestigio, captación de clientes y relevancia social se va a sustentar sobre tres pilares fundamentales- hizo un gesto al técnico del ordenador para que pasase a la siguiente diapositiva-. El primero de ellos será la potenciación de nuestra fundación, en primer lugar le cambiaremos el nombre, que pasará a llamarse “Laponia en vuestros corazones” y en segundo lugar elegiremos proyectos de actuación estratégica que no supongan un elevado coste para nosotros, pero que nos den una relevancia y notoriedad sobresaliente. Se me ocurren algunos ejemplos como el que nuestros empleados donen juguetes y alimentos para el tercer mundo, el que se presenten voluntarios para realizar actuaciones teatrales en centros de la tercera edad, de enfermos crónicos o de orfanatos...-hizo una pausa-. Ya se le ocurrirán más proyectos, seguro- dijo esto último dirigiendo su mirada al director de marketing.<br />-Sí señor- dijo éste.<br />-El segundo de ellos es un pilar de actuación inmediata, no podemos perder el carro del resto de empresas que nos llevan ventaja en este asunto. Me refiero al desarrollo sostenible, un compromiso social, económico y ecológico. Los dos primeros aspectos los podemos alcanzar con mi anterior propuesta y el compromiso ecológico con pequeñas acciones, por supuesto sin ningún coste para nosotros, pero de relevancia. También se me ocurre un ejemplo que sería el “trineo verde”, consistente en usar los excrementos de nuestros renos como abono para los cultivos del tercer mundo. ¿Qué les parece la idea?- dijo dirigiendo su mirada con orgullo a cada uno de los miembros del comité.<br />-¡Magnífica, fantástica! -dijeron unos-. ¿¡Cómo no se nos había ocurrido antes!?- dijeron otros.<br />-Y el tercero señores, es sin duda el más importante. ¿Cómo vamos a darle notoriedad a todas nuestras actuaciones anteriores?- hizo una pausa mirando a todos los presentes, luego continuó-, pues con una incisiva campaña de marketing que venda las altruistas excelencias de nuestra empresa. Tenemos que volver a hacer hincapié en los cuentos para niños, rodear a Papá Noel de ese halo bonachón y de repartidor de ilusiones que siempre ha tenido. Debemos regresar a la industria cinematográfica, que se vuelvan a rodar más películas donde nuestros duendes son empleados felices que trabajan para hacer felices a los niños.<br />-Pero los niños no son nuestro mercado- dijo el director de marketing.<br />-Abre los ojos, piensa –le dijo con tono de enfado-. ¿Quién lee los cuentos a los niños, quién los acompaña al cine?- dijo Papá Noel.<br />-Claro señor- y todos miraron con reprobación al director de marketing.<br /><br />Al día siguiente la circular del director de recursos humanos fue difundida por toda la compañía, su comienzo decía así:<br /><br />“Nos encontramos inmersos en plena crisis financiera mundial. Debido a esta situación, este año nos hemos visto obligados a tomar la decisión de no entregar cesta de navidad y regalos a los hijos de nuestros empleados. Tampoco se celebrará función de circo como en otras ocasiones.<br /><br />Nuestro modelo de gestión empresarial siempre ha tenido como punto inamovible el mantenimiento de los puestos de trabajo, por ello nuestra decisión ha sido acorde a nuestra filosofía y política empresarial. Nuestros empleados son el bien más preciado con el que contamos...”<br /><br />A las pocas horas una nota anónima estaba circulando entre los empleados de la compañía. Decía así:<br /><br />“¡Basta ya! De que la demagogia y retórica referente al mantenimiento del empleo sirva como excusa para la reducción continua de nuestras ventajas laborales. Si para mejorar las cuentas de la empresa, es decir, reducir costes, aumentar los beneficios y no degradar el nombre de la marca, hubiese que pasar por el despido de 500 trabajadores, la dirección no se iba a parar en sentimientos humanistas o filantrópicos. Los despidos serían fulminantes.<br /><br />Sería anecdótico, pero significativo de cara a la imagen de nuestros directivos, si éstos se redujesen el bono de final de año en sólo un 10 por ciento. ¿Por qué no lo hacen?<br /><br />Si un beneficio social de los empleados se elimina un año, la experiencia nos dice que aunque las causas que excusaron la medida desaparezcan, también lo habrá hecho para siempre el beneficio social.<br /><br />¿Por qué siempre los recortes se producen en la masa de trabajadores?, no creo que porque el ahorro sea mayor, sino porque éstos no tienen la fuerza necesaria para realizar una presión en bloque. La dirección sabe muy bien la clase de empleados que ha ido creando a lo largo de los años, y sabe muy bien que ha infiltrado dóciles ovejas entre la manada con sus continuos cursos de gestión de los mandos intermedios. Creando tal cantidad de estos mandos, que actualmente son un porcentaje bastante representativo entre los empleados. Han atado todos los cabos, ahora sólo les queda el hacer y deshacer sin oposición.<br /><br />Uno de los suyos”<br /><br /><br />La noche del día 24 de diciembre muchos padres se asomaron a las ventanas de sus hogares, sintiendo una enorme sensación de tranquilidad miraron al cielo. Allí vieron a Papá Noel tirando de sus renos y se sintieron seguros.<br /><br /><br /><span style="font-size:85%;">(1)CEO = Siglas de origen anglosajón, como casi todos los snobismos relevantes en el mundo empresarial, que significan Consejero Delegado (el que más manda en una empresa)</span></span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-18050182908426378262009-12-02T23:52:00.004+01:002009-12-03T00:05:22.889+01:00EL CAMBIO (AVE REPTILIS)<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;"></span></div><div align="justify"><span style="font-family:times new roman;"></span> </div><div align="justify"><span style="font-family:times new roman;"></span> </div><div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">El disparo sonó como un grito en la niebla. Ella con el alma rota en mil pedazos todavía sostenía el arma en sus manos cuando entró la policía.<br /><br /><br /><strong>Una hora antes.</strong><br /><br />Sara se postró al lado de la cama. Su llanto no la dejaba hablar, miraba a aquel ser deforme, una parodia de vida, y sollozaba. Había pasado mucho tiempo desde el inicio de la degeneración. Desde los primeros cambios que de forma imperceptible fueron transformando el cuerpo de su amado. Ya no notaba el nauseabundo olor que llenaba el dormitorio, un insano y pestilente hedor que de forma progresiva se había adueñado del aire que respiraba.<br /><br />-No...lloresssss- dijo el ser que se encontraba tumbado en la cama. Unas palabras que salían forzadas por un sibilante golpe de voz.<br />-¡Amor, no puedo! ¡Me muero!- dijo Sara entre profundos llantos.<br />-¡Má...ta...- la voz salía ahogada de la garganta de aquel enorme reptil, entrecortada- ...me!<br />-No puedo. ¡Dios!, ¡¿por qué has permitido esto, por qué?!- Sara levantaba su cabeza al techo de la habitación, sus manos posadas sobre las húmedas sábanas que cubrían a aquel ser. Imploraba una solución, un final que se negaba a admitir.<br />-¡Mi...- las palabras brotaron tras una larga pausa, un silencio que llenaba el desesperado llanto de Sara-...ca...jón..., abre..., abre!<br /><br />Sara miró con la desesperación del milagro venidero, giró la cabeza y vio la mesita de noche a su izquierda. Abrió el cajón con las manos temblorosas, sus lágrimas bañaban sus ojos, ahora grandes como dos lunas rojas al atardecer. Un revólver era lo único que había dentro. Sara lo cogió entre sus manos, estuvo todo el tiempo del mundo mirándolo.<br /><br /><br /><strong>Una semana antes.</strong><br /><br />-Ssssiénta...te a... mi lado ...ca...riño- dijo el amorfo ser que permanecía tumbado en la cama.<br />-Amor- ella apoyó su cabeza sobre el tronco del ser. Ahora no lloraba, era el primer momento en muchos días. Creía que se le habían secado las lágrimas, que ya no sería capaz de producir más-, no hables, te pondrás bien.<br />-Te...quiero- fue capaz de pronunciarlo de un solo golpe de voz- no ...me ...mi...ressss.<br />-No te dejaré solo, estaré siempre a tu lado. No me importa mirarte. Saldremos adelante, el antídoto hará efecto- ella todavía confiaba; su fe ciega en la curación se negaba a admitir otro final.<br /><br />Hablaba con Mario y pensaba que no era una serpiente. Quería evadir aquella realidad, cada momento se repetía que aquella pesadilla pasaría, despertarían juntos en alguna isla paradisíaca hablando del hipnótico sueño que de forma conjunta habían tenido los dos. Se reirían del nauseabundo olor que los dos habían sentido, de cómo pensaron que él se había ido transformando en una monstruosa serpiente, un abominable ofidio que ocupaba la habitación de su casa. De cómo ella creía que sólo una intervención celestial podía parar aquella paranoia.<br /><br />Con la cabeza sobre las impregnadas sábanas Sara esperaba un “Deus ex machina” redentor surgido de algún ángulo de la habitación. Aunque ella sabía que en el fondo Mario sería considerado un Prometeo por los dioses.<br /><br /><br /><strong>Dos semanas antes.</strong><br /><br />Mario miraba sin asomo de perplejidad el color de su piel, era verde oscura, casi marrón, brillante a la tenue luz de la lámpara del techo. Su capacidad de asombro hacía meses que había muerto. Esperaba algo, no sabía qué; quizás un milagro. Su muerte. Sara no debía padecer más, era su mayor preocupación en aquellos momentos. Él sabía que su reversión era imposible, su final sería trágico.<br /><br />Su tronco se había alargado hasta tener que enrollarse al final de la cama en un rizo de monstruoso trazo. No lo veía con claridad pero se había visto reflejado en el vaso de agua de su mesa. Sólo había mirado una vez, lo suficiente para volver la vista con rapidez. Sus orejas habían desaparecido, su boca estirado de forma grotesca hacia atrás, su lengua dividido de forma bífida y la nariz se había achatado tanto que casi había desaparecido. Sólo dos agujeros indicaban el lugar por el que Mario había respirado como un hombre.<br /><br />Bajo la mirada de lo que una vez fueron ojos humanos se escondía su más dolorosa realidad, la maldición de aquel cuerpo y un cerebro que razonaba como el de Mario. Una mente que le dictaba órdenes que su escamoso tronco no podía cumplir, que lanzaba palabras a una garganta carente de cuerdas vocales. Una razón que simplemente le sujetaba a un mundo de sentimientos humanos. Mario pedía perderla, soñaba con que se diluyese en los instintos más primarios de los animales, pero su pesadilla le despertaba todas las mañanas con un pensamiento racional.<br /><br />Su serpenteante silueta se dibujaba bajo unas sábanas manchadas de una putrefacta viscosidad que destilaban sus excrecencias. Ella entraba en la habitación todos los días y lloraba, durante eternos minutos. Él la observaba y callaba, quería morir. Ella le pedía casi de rodillas que fuesen al hospital, pero él le aseguraba que nadie podía hacer nada por él. Le recordaba la conversación de la semana anterior, debía tener fe en los efectos del antídoto, le decía. Pero él hacía tiempo que había perdido la esperanza, ahora sólo cabía esperar que la mano que él no tenía no temblase en darle la paz.<br /><br /><br /><strong>Tres semanas antes.<br /></strong><br />El dolor parece haber desaparecido. Mario intenta articular palabras y éstas aparecen de una forma muy distorsionada, nota el siseo de su voz y se alarma. Le llega el insano olor de la putrefacción, aunque su mente ya se ha acostumbrado a él, lo sigue notando flotar en el ambiente. Sigue preocupado por Sara, porque le vea así, por sus sufrimientos.<br /><br />Su cuerpo antropomorfo ha sido casi engullido por el ofidio, ahora su cerebro manda órdenes a unos miembros que ya no existen. Mira debajo de las sábanas, sin asomo de sorpresa ve que la pierna reseca, contraída, caricatura de lo que un día fue una vigorosa extremidad ha seguido el destino del resto, se ha desprendido de su cuerpo. Más bien de su forma de áspid.<br /><br />-Cariño, vengo a cambiarte las sábanas- dijo Sara entrando en la habitación. No lloraba, pero sus ojos delataban que lo había hecho recientemente, y mucho.<br />-No te ...preocu...pessss ...essstán...bien- dijo Mario en un titánico esfuerzo por hablar, por denotar seguridad en sus palabras. Era imposible.<br />-¿Cómo estás?- era la pregunta que le hacía diariamente, no hacía falta contestar, ella le miraba durante un rato y luego las lágrimas volvían a sus ojos. Caían sobre las sábanas, mezclándose con los fluidos corporales de Mario.<br />-Essstoy ...me...jor- él sabía que no era cierto. Ella también. Le pasó la mano por su cara escamosa, fría. La calidez de la mano de Sara le produjo una sensación de confort. Estos silencios eran los únicos momentos por los que quería luchar, pero su razón le invitaba a abandonar la idea, a centrarse en el final.<br /><br /><br /><strong>Un mes antes.</strong><br /><br />La mutación prosigue de forma imparable, desafiando cualquier ley natural que haya existido. Hoy el horror que parecía no tener límites ha subido un escalón más en su batalla. Sus miembros habían empezado a tomar una coloración parda, se habían ido reduciendo de tamaño hasta parecer las extremidades de un muñeco acoplados a un cuerpo de proporción normal. El movimiento de los mismos había desaparecido por completo , una degradación que ha llegado en cuestión de días y que ha podido observar avanzar hora tras hora.<br /><br />El dolor tan intenso de los últimos meses ha remitido, ya sólo nota molestias, punzadas que aparecen y desaparecen cada vez más espaciadas en el tiempo. Pero un crujido seco le llama la atención, siente pánico a mirar bajo la sábana. Lo hace. Uno de sus resecos brazos se ha desprendido de su tronco. Sin dolor, sin aviso, siguiendo de forma procelosa la terrible angustia del cambio. Mario no puede llorar, lo intenta pero sus ojos están secos. El antídoto parece no surtir efecto, ¿quizás era un placebo para Sara?<br /><br />Cuando ella entra en la habitación a cambiarle las sábanas descubre horrorizada el macabro cuadro. Un cuerpo de sierpe escamoso con una parte todavía humana, pero cada vez más deformada por el avance animal. Su pequeño brazo desgajado de su cuerpo. Sara grita presa del pánico, de la desesperación más absoluta.<br /><br />-¡Vamos al hospital ahora mismo, sin falta!- grita con decisión en sus palabras.<br />-No lo ...hagasss- su voz sonaba como una pequeña fuga de gas- el antído...to ...ha...rá ...efecto.<br />-No podemos esperar más Mario. ¡Necesitas urgentemente que alguien pare esta locura, que te curen!- dijo con lágrimas en los ojos.<br />-Impo...sssible, nadie ssssabe de- pausa- mi dolen...cia, massss que yo –tomó aire, estaba muy fatigado.<br />-Pero alguien allí sabrá qué hacer, qué medicamento darte. Tu les puedes guiar en la curación- la desesperación brotaba en cada una de sus palabras. Sara se sentía morir en vida.<br />-Nadie sssa...be. Sssólo con...ssseguirían- pausa- parar losss ....efectossss del antí...doto- dijo Mario exhausto.<br />-Mi vida- dijo Sara abrazando el escamoso cuerpo que se escondía bajo una mojada sábana.<br /><br /><br /><strong>Dos meses antes.</strong><br /><br />-Llevo varioss messess de pre...paración. Esste antídoto revertirá...el proce...sso- dijo Mario a Sara que permanecía sentada a su lado en la cama.<br />-¡Rápido, no perdamos tiempo! ¿Qué tengo que hacer?- le preguntó Sara con la impaciencia propia de la desesperación. Un rayo de luz se abrió pasó en la densa oscuridad de su mente.<br />-Bája...me en la ssilla...de...ruedass- dijo Mario.<br /><br />Sara con gran esfuerzo movió el cuerpo de Mario a la silla de ruedas que tenían en la habitación de al lado. Mario apretaba su deforme boca en señal de dolor, éste era insoportable y llenaba cada segundo de su existencia. El descenso al laboratorio del sótano llevó a Sara varias horas, con sumo cuidado bajaba escalón a escalón. Mario seguía sufriendo, por ella.<br /><br />Sara encendió las luces del laboratorio, varios fluorescentes del techo parpadearon hasta que la estancia se llenó de una luz blanquecina. Cientos de botes de cristal, tubos de ensayo y extraños aparatos llenaban la enorme mesa del fondo de la sala. Las estanterías estaban llenas con cientos de frascos de líquidos de colores etiquetados con extraños nombres en latín.<br /><br />Las horas pasaban sin que Mario y Sara distinguiesen el día de la noche, ninguna ventana exterior les indicaba el horario. ¿Fue sólo una noche, fueron varias?, ninguno sabría decirlo, enfrascados como estaban en la preparación del brebaje salvador. Mario con su voz entrecortada y sobrenatural iba dictando los pasos a seguir. Sara con pulso tembloroso mezclaba el contenido de tubos de ensayo, calentaba los matraces y seleccionaba el contenido de los frascos.<br /><br />Después de un largo proceso de elaboración Mario dio por finalizada la pócima. Un pequeño tubo lleno hasta la mitad de un líquido pardo oscuro. El antídoto. Sara se lo acercó a la boca, tenía las lágrimas saltadas. Mario estaba nervioso, temblaba por dentro ante la cercanía del momento, de uno muy especial, el decisivo. Bebió.<br /><br /><br /><strong>Tres meses antes.<br /></strong><br />Ahora ya no puede estar de pie, Mario se ha tumbado en la cama porque nota que se cae, que sus piernas ya no pueden sostenerle. Lo notó esa misma mañana, Sara ya se había levantado y Mario había permanecido hasta las 12 del mediodía, algo muy raro en él. Fue al incorporarse, primero un gran dolor en sus extremidades, luego como los últimos días, recorriéndole todo el cuerpo.<br /><br />Sentado en la cama se miró en el espejo que tenía justo enfrente, el espejo delante del que había pasado tantas horas, atusándose un pelo que ahora empezaba a caérsele de forma alarmante. Recuerdos de reflejos que le habían mostrado un rostro bello, con unos profundos ojos verdes, nariz pequeña y boca en perfecta armonía con el resto. Ahora se asustó ante la visión de sus ojos, sintió como una punzada de pánico le recorría la columna vertebral. Su iris había desaparecido y en su lugar su ojo mostraba una membrana de color verde, su pupila se había transformado en una línea negra vertical. El blanco cutis que con tanto esmero se había cuidado aparecía ahora lleno de unas escamas entre verde y marrón. Gritó de pánico.<br /><br />-¡Qué ocurre Mario!- Sara apareció apresuradamente ante la puerta de la habitación. Sus ojos se agrandaron por la sorpresa- ¡Dios!- fue lo único que acertó a decir.<br />-No miress Ssara- dijo él llevándose las manos con dificultad ante su cara.<br />-¡Estás peor!, ¡tu cara Mario, tu cara!- gritó Sara.<br />-Essto cambia...rá –dijo con dificultad Mario-. Comenza...ré a mejorar.<br />-¡Nos vamos al hospital ahora mismo!- dijo ella con la premura que daba la gravedad de la situación.<br />-¡No Ssara! –gritó Mario-. Allí sso...lo me aleja...rían de mi ...laborato...rio.<br />-¡Me da igual tienen que verte los especialistas!<br />-¿Especia...liss...tass?, yo ssoy el único que ssa..be lo que...me passa.<br />-Pero allí tendrán la tecnología para curarte- ahora Sara lloraba desconsoladamente.<br />-Ssolo yo ...puedo...rever...tir essta ...situa...ción. Ssolo yo. ¿Lo entien...dess Ssara?- dijo Mario con una súplica en su voz- Conoz...co el antí...doto.<br /><br />Mario sentía el dolor recorrerle cada una de sus vértebras. Sara no lo había visto todo, porque también sus extremidades habían comenzado a mutar. Se habían reducido, adelgazado y las movía con mucha dificultad. Sara se abrazó a Mario, su pijama estaba manchado, ronchas húmedas lo salpicaban, pero ninguno de los dos se dio cuenta, fundidos como estaban en una sola alma.<br /><br /><br /><strong>Cuatro meses antes.<br /></strong><br />-¿Qué te ocurre Mario, qué te está pasando?- le preguntó Sara con un nudo en la garganta.<br />-¿Recuerdass mi gran descubrimiento?- le preguntó Mario aquella mañana al despertar.<br />-Claro amor, eres un científico incomprendido, algún día tendrás tu gran lugar dentro del panteón de los grandes genios.<br />-No lo creo- dijo Mario, que le costaba expresarse con dificultad.<br />-¿Por qué lo dices?- preguntó Sara con extrañeza.<br />-Ess sobre la enfermedad que esstoy padeciendo- Mario hizo una pausa para tomar aire y siguió hablando-. No es algo casual.<br />-¿A qué te refieres?, ¡dime Mario!- dijo ella con un tono no disimulado de ansiedad por conocer la respuesta.<br />-Lass pruebass las hice con mi persona- dijo Mario de un golpe de voz. Sin esperar la respuesta de Sara prosiguió-. Algo falló.<br />-¿Pero te vas a poner bien, verdad?- dijo ella con lágrimas en los ojos.<br />-Claro, no te preocupess –le costaba hablar, los golpes de aire no le llenaban lo suficiente para pronunciar con claridad, se cansaba-. Sse donde esstá el problema y mi enfermedad remitirá en breve. Ten confianza.<br />-¡Oh Mario!, te quiero tanto, si te sucediese algo me moriría- ahora sus primeras lágrimas se habían convertido en un gran llanto. Abrazó con fuerza a Mario, lo apretó con ternura contra su pecho, sentía su corazón latir con viveza-. Prométeme que te pondrás bien, ¡prométemelo!- le dijo casi gritando de rabia, suplicándole una respuesta que le devolviese la vida.<br />-Claro amor –dijo él con un tono de fingida esperanza- te prometo que lo tengo todo –hizo una pausa porque no le llegaba el aire- ...bajo control.<br /><br /><br />Mario y Sara estaban sentados a la mesa, cenando. Cuando él se levantó a por agua a la nevera. Ella se fijó en sus andares. Parecía que arrastrase los pies, como si llevase una pesada carga a sus espaldas. Al volver con la jarra de agua, ésta temblaba en sus manos, el líquido se desplazaba como en una pequeña tempestad. Sara lo vio todo llena de un horror interior. En poco tiempo la decadencia física de Mario se había hecho más palpable, como si de unos primeros síntomas se hubiese pasado a la gravedad de una enfermedad en unos escasos segundos.<br /><br />Mario miraba a Sara a los ojos, ninguno de los dos pronunciaba ninguna palabra, el silencio se había hecho pasajero de la cena. Sara acariciaba la mano de Mario, estaba fría, como un témpano. Su piel tenía escaras, notaba pequeñas escamas o quizás era su mente que asociaba las ideas. Sara no lo sabía, pero él la veía con dificultad, las imágenes no las enfocaba con nitidez, unas sombras borrosas aparecían de vez en cuando en su campo de visión. Él alzó la cuchara para llevarse la sopa a la boca, pero su pulso le falló y el cubierto cayó con gran estrépito sobre el plato. El dolor era insoportable. Sara que lo estaba viendo agachó la cabeza y lloró en silencio.<br /><br /><br /><strong>Cinco meses antes.</strong><br /><br />Mario notaba su lengua como un trapo, se pegaba a su paladar y se le trababa cuando intentaba pronunciar alguna palabra. Estaba asustado, sentía mucho miedo. Sus articulaciones estaban rígidas, andaba con dificultad y le pesaban los brazos. Cualquier actividad física, por pequeña que fuese se estaba convirtiendo en una prueba de esfuerzo.<br /><br />-¿Te encuentras bien cariño?- le preguntó una noche Sara.<br />-Sí, simplemente me debe haber sentado mal algo de la cena- dijo, mientras se bajaba la manga del pijama para que ella no viese los eccemas de su brazo. La pomada de corticoides que se estaba aplicando no le estaba curando, ni aliviando. Los picores se extendían a lo largo de su cuerpo, al igual que esas fastidiosas afecciones cutáneas.<br />-Debes trabajar menos cariño, creo que tantas horas en el laboratorio están afectando a tus nervios y a tu forma física.<br />-Mañana seguramente me levantaré mucho mejor- El dolor que en punzadas le llegaba a sus sienes era por momentos insoportable, tenía que cerrar los ojos y respirar hondo para resistirlo. Aunque algo en su interior le decía que aquello no era producto de alguna enfermedad. No eran simples eccemas, hipotonía, vista cansada, migrañas o hipotermia. Lo que estaba padeciendo era un efecto secundario.<br /><br /><br /><strong>Seis meses antes.</strong><br /><br />-¿Qué tienes en el brazo?- le preguntó ella mientras desayunaban.<br />-Es una pequeña quemadura que me hice ayer en el laboratorio- le respondió él, sabiendo que no tenía ninguna explicación para aquella extraña afección de su brazo.<br />-Tienes que cuidártela, no tiene buen aspecto- le dijo ella con cara de desagrado, mientras miraba aquella mancha rojiza.<br />-No te preocupes cariño me estoy dando una crema que me dejará el brazo como nuevo- aunque lo cierto es que le picaba bastante, además si se presionaba con el dedo le dolía, mucho.<br /><br />Cuando ella se levantó de la silla para irse al trabajo, un sudor frío le recorrió la frente a Mario y una punzada de calambre su columna. Enseguida desechó su pensamiento, pero por un instante relacionó aquel eccema con la hipotermia que sufría y el cansancio en la vista. Sólo por un instante pensó en alguna jugada del destino, pero sólo por un segundo, luego volvió a sus pensamientos de científico.<br /><br /><br /><strong>Siete meses antes.</strong><br /><br />Aquella mañana Mario se levantó con una enorme sensación de frío, miró el termómetro de la habitación y marcaba 23 grados. Una temperatura ideal. Quizás estaba entrando en un proceso febril. Se fue hasta el botiquín que tenía en el cuarto de baño y buscó un termómetro de mercurio. Se lo puso en la axila. A los cinco minutos lo cogió entre sus dedos y lo miró a la luz de la lámpara. ¡¿34 grados?! Exclamó para sí. En aquellos momentos el mercurio contraído en su extremo hizo reventar el termómetro, que se volatilizó entre sus dedos.<br /><br /><br /><strong>Ocho meses antes.</strong><br /><br />Aquella tarde fueron a ver una película, a un pequeño cine club que estaba proyectando un ciclo dedicado a Cronenberg. Lástima, pensó Mario, pues el día anterior habían puesto “Inseparables”, su favorita. Pero la de hoy le gustaba también mucho, aunque era la cuarta vez que la veía, se trataba de “La mosca”, un pequeño clásico, versión adaptada al universo del director de otro clásico de los años cincuenta.<br /><br />-Me ha encantado la película- le dijo Sara al salir del cine.<br />-Es una película muy buena. Por cierto Sara ¿has notado si estaba desenfocada la proyección de la imagen?<br />-No, se veía con nitidez.<br />-Debe ser entonces que me estoy haciendo mayor –dijo con humor Mario-. Algunas partes de la película me han parecido borrosas. Debe ser el primer aviso de que voy a necesitar gafas.<br />-Y te llamaré gafitas cuatro ojos- dijo riéndose Sara.<br />-No te atreverás, ¡porque la furia de La mosca caerá sobre ti!- ambos rieron a carcajadas.<br />-¿Y dices que es una versión de otra película más antigua?- preguntó Sara.<br />-Sí, de una de los años cincuenta protagonizada por Vincent Price. Esta nueva versión se centra más en el protagonista principal, en los cambios que afectando a su físico, terminan mutando su mente.<br />-Todo un drama, sí señor. Escalofriante- dijo ella y Mario la abrazó con fuerza.<br />-¿A que ya no sientes escalofríos?<br />-No, ahora siento el abrazo de la serpiente constrictor- dijo Sara y los dos rieron al unísono.<br /><br /><br /><strong>Nueve meses antes.</strong><br /><br />-¿Me prestas tu crema hidratante?- le preguntó una mañana Mario a Sara mientras se aseaban en el cuarto de baño.<br />-¿Es para algún fin científico?- dijo ella pensando en sus experimentos.<br />-No, siento decirte que es para fines mundanos. Noto la piel de mis manos muy resecas.<br />-Claro, ya te he dicho que cuando trabajes con esos potingues en el laboratorio te pongas guantes<br /><br />Después de un mes Mario siente el éxito correr por sus venas. Tras haber tomado su preparado, no ha notado ninguna acción perniciosa sobre su organismo, los efectos secundarios se pueden decir que son nulos. Eso sí, piensa con humor, el que sean las dos de la tarde y el haber llegado a tan altas cimas de la ciencia le dan unas ganas tremendas de comer carne, y cuanto menos hecha, mejor.<br /><br /><br /><strong>Diez meses antes.</strong><br /><br />Su mano le temblaba ante la excitación del momento, el fruto de tantos años de investigación, frustraciones, noches en vela y en definitiva de perseverancia, estaba en sus manos. Una jeringuilla con un líquido verdoso dentro. Se apretó el compresor tirando de un extremo con sus dientes y del otro con el brazo derecho. Se palpó con el dedo índice hasta localizarse la vena del antebrazo y se inyectó el contenido. Un frío intenso le recorrió el brazo. El líquido de su vida estaba dentro de él.<br /><br />Llamaron a la puerta del laboratorio.<br /><br />-Espera cariño- rápidamente escondió la jeringuilla y se tapó el antebrazo con la manga de la bata-. ¡Pasa!<br />-¿Estabas haciendo cosas malas sin mi?- le preguntó Sara con un aire de “femme fatal” en su voz.<br />-Esas cosas me gusta hacerlas contigo- y cogiéndola por la cintura la besó apasionadamente.<br /><br /><br /><strong>Once meses antes.<br /></strong><br />-¡Malditos burócratas!- exclamó Mario haciendo aspavientos con un papel en sus manos.<br />-¿Qué ha pasado cariño?- le preguntó Sara.<br />-Esos estúpidos científicos de salón no han aprobado mi descubrimiento, dicen que no es viable para la cura del cáncer. Además me conminan a que abandone mis estudios de inmediato, prohibiéndome de forma expresa que continúe realizando cualquier “experimento” sobre animales y que por supuesto no habrá un programa de prueba sobre humanos. ¡Con estos políticos de bata blanca no podrá avanzar nunca la ciencia!- Mario estaba cada vez más irritado, su voz reflejaba la ira del que se ve injustamente rechazado-. Estoy convencido de que intereses ocultos de laboratorios están detrás de esta decisión. Intentan que mi medicamento nunca llegue a comercializarse. ¿Crees que piensan en los ciudadanos, en curar sus males? ¡No!, sólo piensan en los pingües beneficios que les reportan las patentes y los impuestos.<br />-Cálmate cariño, tu no eres sólo un científico, tu obra es humanista y eso no lo soportan los políticos Algún día el mundo entero comprenderá tu obra y tu sacrificio. Entonces tu dedicación no habrá sido en vano.<br />-¡Malditas víboras!- exclamó Mario.,<br /><br /><br /><strong>Un año antes.</strong><br /><br />-¡Eureka!- la voz de Mario resonaba por los pasillos de su casa. Fue hasta el salón, donde su mujer estaba viendo la televisión, la abrazó, la levantó un palmo del suelo y comenzó a dar vueltas con ella en círculos.<br />-¡¿Qué ocurre, Mario?!- preguntó, exultante de alegría, contagiada por el arranque de felicidad de Mario.<br />-¡Lo tengo!, ¡lo tengo!- gritaba Mario<br />-¡¿Pero qué?!, ¡dime, Mario!<br />-¡La fórmula!, ¡he conseguido la fórmula que he buscado durante años!<br />-¡Lo sabía, sabía que lo conseguirías!- ahora fue Sara la que se lanzó a los brazos de Mario, estrechándolo con fuerza.<br />-Los últimos resultados con los ratones han sido positivos Sara, el tumor ha desaparecido en la totalidad de ellos- la emoción brillaba con vida propia en sus ojos.<br />-Lo sabía, lo sabía- era lo único que alcanzaba a repetir Sara, contagiada como estaba de la emoción del momento.<br />-¿Sabes lo que esto significa?<br />-¡Dime Mario!<br />-Que el tumor tiene cura, que se ha abierto la puerta a la salvación de las personas con esta enfermedad. La lacra de este siglo tiene sus días contados. El siguiente paso es seguir con las pruebas, obtener la autorización para realizarla con humanos.<br />-Siempre confié en ti, en tu fuerza, no has desfallecido en tu búsqueda y lo has encontrado. Eres un hito para la humanidad. Tu nombre serpenteará alrededor del mundo.<br /><br /><br /><strong>Un año y medio antes.</strong><br /><br />Sara y Mario viven un apasionado amor que no sólo pervive desde el primer día, hace ahora seis meses, sino que sube un peldaño cada momento que beben de él. Lo viven con un sentimiento que para cualquier observador externo parecería ajeno a este mundo. Ellos lo escenifican cada día, abstraídos de cualquier ruido exterior, en su nueva casa de que se han comprado en las afueras de la ciudad.<br /><br />En el sótano de su nueva casa tiene él tiene su laboratorio, donde continua con la investigación que comenzó hace cinco años. Con la beca que le concede desde entonces la Universidad estudia la posibilidad de desarrollar células curativas que sustituyan a las tumorales a partir de embriones de serpientes. Todo ocurrió por casualidad cuando investigando la reproducción de los reptiles en una clase de biología, se fijó en una célula del embrión que mutaba. Aisló esta célula y la puso en contacto con otras alteradas del propio reptil. Estas últimas fueron rápidamente sustituidas por la primera que se reprodujo a un ritmo mucho más acelerado del normal.<br /><br />A partir de aquí comenzó el estudio de esta célula, su aislamiento, reproducción y puesta en contacto con otras células de animales de diferente especie, como ratones y cobayas. El resultado no fue tan espectacular como al principio, pero tuvo la corazonada de que con la investigación continuada y el esfuerzo adecuado, el camino que estaba siguiendo era el correcto para llegar a los fines que tenía en mente. Comenzó entonces su largo recorrido de investigación y experimentación.<br /><br />Sara en todo momento le acompañaba, no sólo físicamente, sino dándole el ánimo que en algunas ocasiones necesitaba para no desfallecer cuando los resultados después de meses de investigación eran decepcionantes. Era su pilar de apoyo para contarle sus inquietudes más profundas, sus anhelos más esperados y sus frustraciones más profundas. Ella estaba siempre allí para escucharle, para resolver sus nudos mentales cuando lo necesitaba.<br /><br /><br /><strong>Dos años antes.<br /></strong><br />Mario se obligó a ir a la fiesta, sus amigos lo sacaron casi a la fuerza del laboratorio de la Universidad. Él era profesor y trabajaba con una beca para el estudio de un remedio contra el cáncer en la propia Facultad. Era la fiesta de navidad y decidió que salir un momento de su concentración tendría efectos positivos sobre su cabeza.<br /><br />Cuando llegó a la fiesta el bullicio, las luces y la música lo aturdieron hasta el extremo de que tuvo que salir fuera a respirar un poco de aire. Fue allí donde la conoció, en aquel frío jardín en penumbra que rodeaba a un precioso estanque donde el agua discurría placidamente. Ella llevaba un vestido de brillantes lentejuelas que simulaban una cota escamosa. Alrededor de su cuello lucía una imponente boa de plumas de color violáceo. Su hermosa figura se erguía sobre unos zapatos de fino tacón y piel de serpiente.<br /><br />-Se aburre ¿verdad?- le preguntó ella pillándole desprevenido.<br />-¿eh?...¡ah!, un poco- contestó él. Sus ojos eran tan verdes como una frondosa selva.<br />-A mi me pasa igual en estas fiestas. Me aburre esta música y el griterío de la gente. Echo de menos la tranquilidad de la noche- dijo ella-. Por cierto, me llamo Sara.<br />-Yo me llamo Mario y trabajo en la Facultad de medicina.<br />-Muy interesante, ¿cuál es su especialidad médica?<br />-Soy investigador, un ratón de laboratorio- dijo él. Se miraron durante un corto instante y rieron al unísono.<br /><br />Hay leyes universales que son inmutables pero que nadie conoce hasta que no topa con uno de sus artículos. Esa noche Sara y Mario se encontraron con el que hacía referencia al amor universal, a aquel que sólo se encuentra cuando uno no lo busca. Aquel que sucede cuando dos almas errantes, creadas la una para la otra, que podían pasar por el firmamento sin encontrarse, colisionan. A partir de aquí surgió una historia de amor que los llevó hasta el final de su trayecto. La historia de amor más bonita descrita entre dos corazones, entre dos animales.<br /><br /><br /><strong>Un minuto antes.</strong><br /><br />-¡Disssss...pára...me!</span></div><div align="justify"><span style="font-family:Times New Roman;"></span></div><div align="justify"></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-55966740519941238362009-11-10T18:51:00.001+01:002009-11-10T18:54:00.636+01:00PROPÓSITOS, CONFESIONES Y PERSONAJES<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">A partir de aquí voy a dejar de publicar semanalmente “El ladrón de sueños”. Creo que llega a ser cansino para el que abre el blog encontrarse con un trozo de relato que seguramente ya habrá leído, y si no es así, que no se lo haya leído, puede descargarse en “PDF” la versión íntegra de forma gratuita pinchando en este <a href="http://www.bubok.com/libros/15487/El-ladron-de-suenos">enlace</a>.<br /><br />Mi primera intención al escribir el libro de las andanzas de Howard era presentarlo por partes a los lectores, pero luego lo publiqué en Bubok y ya no veo la necesidad de tenerlo en dos sitios. Eso sí, pese a que mi tiempo lo absorbe la nueva novela que estoy escribiendo, intentaré colgar algún escrito de vez en cuando en este blog.<br /><br />Por otro lado sigo, como decía, escribiendo mi nueva novela, totalmente diferente de la anterior en cuanto a trama, pero no en cuanto a las constantes vitales que subyacen en la personalidad de los personajes. Es muy difícil evadir unos presupuestos básicos como orden de actuación de ciertas actitudes ante la vida. Así Marta Moreti, la protagonista de la nueva novela tiene bastantes rasgos en común con Howard, y estos a su vez con otros protagonistas de los relatos cortos, menos desarrollados conceptualmente, eso sí.<br /><br />Puedo cambiar la acción, hacer más o menos ágil el desarrollo de una trama, pero el comportamiento de los personajes es un “leit motiv” del que no sólo no puedo desprenderme, sino que no quiero hacerlo. La forma en como estos afrontan su tránsito por el mundo, dejándose partes de ellos en cada línea, para llegar al extremo de desaparecer, de permanecer enclaustrado en la propia habitación o en su propia nave espacial, que al final no deja de ser la propia mente de cada uno, este tránsito, como decía, parte de una predestinación que arrancó en un momento anterior a la escritura de la novela, como es el caso de Howard, de una forma muy expresa en Ich-pi-el y más suave, pero con un tácito futuro preescrito, en “El ladrón de sueños”. Yo simplemente me limito a coger a esos personajes y contar una parte de su vida, da lo mismo que sea del centro, del principio o del final, pues si el destino lo llevan ya inscrito en su alma yo sólo puedo narrar lo que les sucede y cómo lo viven.<br /><br />Así sucede con Marta Moreti, alter ego de Howard, en la novela policíaca que estoy desarrollando y que todavía tardará unos meses en ver la luz. No me es tan fácil hacer fluir el desarrollo hasta donde quiero llegar, necesito tiempo para que cada personaje crezca y llene el relato, y esto me cuesta. Estoy intentando desarrollar más a los personajes, que cada uno tenga su forma de pensar y sentir no porque lo diga el narrador, sino porque así lo veamos actuar a lo largo de las páginas del libro. Envidio a las personas que escriben y pueden terminar un libro en un mes, qué facilidad de ideas; mis conexiones, sin embargo, son más lentas, necesito más tiempo.<br /><br />Por último, y ya para terminar, voy a publicar (colgaré el enlace) nueve relatos escritos en este blog, más uno inédito (que todavía tengo que desarrollar) en formato de libro, con una pequeña introducción con la descripción de la génesis e incluso alguna anécdota sobre alguno de ellos. También estará en formato “PDF” de forma gratuita. Creo también que esto es bueno para los que poseen los nuevos libros electrónicos que se pueden cargar directamente en ellos.</span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-3678660246739343172009-11-03T14:38:00.003+01:002009-11-03T21:49:22.447+01:00UNA PIEZA DE NOVELA<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">Algunos me habéis dicho que hace tiempo que no escribo nada nuevo en el blog. Es correcto, pero no lo es que no escriba. Estoy en pleno proceso de escritura de una novela que me está divirtiendo mucho, estoy enganchado a la misma y por eso dedico el tiempo que puedo a ella.<br /><br />Es una novela de corte policiaco, en la que el asesinato de la joven hija de un influyente empresario de Madrid será el hilo conductor para ir descubriendo a personajes corruptos, tristes, vanidosos y sin escrúpulos, pero también a otros honrados, felices, humildes y sensatos. Una trama de muchos personajes y letras (llevo ya más de 100 páginas escritas) que espero os sea entretenida.<br /><br />El personaje principal es la detective Marta Moreti, una mujer inteligente y sensata, pero a la vez llena de miedos y contradicciones, que poco a poco se irá internando en esta jungla de oscuridad que es la propia vida. Se dice que para muestra un botón, aunque en este caso el botón no sea tan representativo de la propia historia como de los miedos de la propia Marta, pues se trata de un sueño que tiene en el capítulo II, en la parte 3. Os dejo con él.</span></div><div align="justify"><span style="font-family:times new roman;"><br /><br /><em></em><strong><em>3<br /></em></strong><br /><em>La noche era el campo de sueños donde la luz no despertaba ningún color. Allí Marta compartía sus horas con sus pensamientos más profundos, con los que nunca salían al exterior porque la muralla de la mente hacía presa de ellos. El sueño era la compuerta que dejaba pasar éstos a través del río de la irrealidad a los campos del raciocinio. Sólo la luz de su sueño la despertaba de la ilusión del mundo físico.<br /><br />Aquella noche soñó con una gran ciudad, enormes edificios que tocaban las nubes, abigarrados en una colosal masa de metal y cristal, las luces se reflejaban en ellos sacando mil colores de las formas que iluminaban. Pero algo extraño sucedía en aquella ciudad, se paró un momento en medio de la acera y notó la quietud, no se oía el ruido de los coches, ni las sirenas de las ambulancias, no se oía el murmullo de la gente. El silencio era sólido, cayó sobre ella como una losa, llenándola de un terror inconsciente.<br /><br />Miró a su alrededor y otra oleada de miedo llenó su alma de un infundado temor, estaba sola, no había nadie a su alrededor, las personas, los coches e incluso los pájaros del cielo habían desaparecido, pero una sensación de pánico la inundaba. El silencio y la soledad campaban a sus anchas por la ciudad. Marta tenía miedo y corrió, como si la persiguiese un asesino, cómo si perdiese el último tren de su vida. Corrió. Corrió. Y se paró agotada, el corazón le latía de forma desenfrenada, sudaba y tenía la camisa empapada, pegada como un esparadrapo a su cuerpo. Gritó. Con toda la rabia de su corazón, con todas sus fuerzas, pero ningún sonido salió de su boca abierta.<br /><br />Siguió corriendo, por las desiertas calles de esa ciudad desconocida donde todos los edificios eran iguales, donde cada calle era igual a la siguiente, donde cada luz reflejaba la misma sombra. Se paró frente a un semáforo, no podía respirar, atenazada por el cansancio y el miedo. Encorvó la espalda para sujetarse las rodillas con las manos, la cabeza mirando al suelo. Los tres colores del semáforo pasaron durante una eternidad frente a ella, el tiempo había dejado de tener un significado, ¿igual qué el espacio? Algo le hizo levantar la cabeza, una punzada de instinto quizás. Al otro lado de la calle una anciana la observaba con el rostro envuelto en sombras.<br /><br />Vestía de negro, aunque más bien parecía de oscuridad. Sin darse cuenta comenzó a caminar hacia ella, sin oír sus pisadas, pero sintiendo la necesidad del encuentro en cada paso. Se situó frente a ella, seguía sin verle el rostro, el negro pañuelo que rodeaba su cabeza eliminaba cualquier fuente de luz. Su perfume le era familiar, al igual que el contorno de su silueta. Estuvo mirándola durante un minuto, o quizás un año. Frente a ella, sin moverse. No existía el tiempo.<br /><br />-¿Vienes a acompañarme? –le preguntó la anciana.<br />-¿A dónde? –le devolvió la pegunta Marta.<br />-Creía que tu me lo ibas a decir.<br />-¿Quizás a su casa? –le volvió a preguntar Marta.<br />-Sí, a mi hogar definitivo.<br />-¿Está en esta ciudad?<br />-Creo que sí, pero no recuerdo la dirección.<br />-¿Y lleva mucho vagando en la noche? –preguntó Marta, que notaba como las palabras salían de su boca sin sonido, flotaban en el aire y se mantenían para luego perder su integridad y difuminarse.<br />-Toda la oscuridad.<br />-¿Es ciega?<br />-Depende del sentido, si te refieres a los edificios, no los veo, si te refieres a tu alma estoy dentro.<br />-Me dan miedo sus palabras.<br />-No las temas, ellas te guiarán a tu destino.<br />-Quiero salir de aquí.<br />-La angustia es el camino de los débiles, sólo los fuertes ven en la oscuridad.<br />-¿Quién eres anciana?, tu voz me resulta ahora familiar –se echó hacia atrás el pañuelo y un negro abismo de pánico se apoderó de Marta. Se estaba contemplando a sí misma con el rostro surcado por las arrugas de la edad.<br /><br />La anciana, ella, se empezó a difuminar, primero fue el color, luego la forma y por último la luz que invadió el espacio que antes había ocupado. Volvía a estar sola, pero acompañada de su conocimiento, de un terror más profundo que el inicio de los tiempos. El vértigo se apoderó de su pensamiento, su mente se tambaleaba entre pensamientos de frenética velocidad. Sintió como caía en el pozo de la oscuridad, mientras daba vueltas como en una escalera de caracol, sin encontrar su fin.<br /><br />Marta despertó entre sábanas revueltas alrededor de su cuerpo, bañada en un pegajoso sudor que lo impregnaba todo. Intentó recordar el sueño, la pesadilla, pero todo llegaba a su mente como retales de confusión. Una ciudad, una anciana, silencio, soledad, ella...muerte. Miró el reloj que tenía junto a su mesita de noche. Eran las seis de la mañana. A las diez era el entierro de la joven y quería asistir, mantenerse a una distancia adecuada y observar.</em></span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-5181321396550725807.post-67711864295739851452009-11-03T14:16:00.000+01:002009-11-03T14:17:23.672+01:00EL LADRÓN DE SUEÑOS (8)<div align="justify"><span style="font-family:times new roman;">Transcurrió una semana sin ninguna novedad reseñable. Mi único contacto con la tripulación se producía cuando me servían las comidas, puntualmente en mi camarote. Pasaba solo la mayor parte del día en mi deprimente habitáculo y cuando salía al exterior no tenía por qué preocuparme de acatar las órdenes del capitán, el resto de marineros ya se ocupaban de esquivarme a mi paso. Rechazo que no dejaba de producirme cierta inquietud y un poco de desasosiego.<br /><br />Una noche en que dormía profundamente me despertó un extraño sonido. Era como un quejido lastimero, un apagado aullido que iba perdiendo el tono poco a poco. Abrí los ojos y permanecí mirando el sucio techo durante un rato, pendiente de verificar que lo que había oído no era en sueños. Lo volví a oír, esta vez mucho más cerca. Me levanté de un salto, encendí la luz y poniéndome mi chaqueta de lana salí al exterior.<br /><br />La noche era fría pero clara, una inmensa luna llena daba luces y sombras en cubierta. De nuevo sonó el extraño aullido y ahora descubrí que provenía del mar. Me asomé por la sucia barandilla de la borda con una expresión de curiosidad y miedo a la vez. Escruté con nerviosos ojos las infinitas aguas que se extendían ante mí. A lo lejos divisé un lento movimiento, unas sombras gibosas se aproximaban hacia el casco del barco. Retrocedí un paso con el corazón paralizado por el terror. Ahora podía confirmar que el extraño aullido lo producían las cosas que se acercaban, lenta pero inexorablemente estaban llegando hasta donde yo me encontraba. Ya podía distinguir unas extrañas siluetas que parecían tener forma humana. Di otro paso más hacia atrás, esta vez lleno de un profundo terror. Me giré para salir corriendo cuando me di de bruces con el capitán que estaba a mi espalda.<br /><br />-¡Atrás capitán,…se acercan! Mire por la borda –dije con una angustiosa voz de pánico.<br />-¿Qué tengo que mirar? –me dijo el capitán con una voz de superioridad.<br />-Aquellas sombras que se acercan por… -dije mirando en dirección al mar, pero éste estaba tranquilo, solo se veía la luna reflejada en las mansas aguas-. Le juro que estaban ahí, varias sombras…-me callé, pues el capitán me miraba con cara de incredulidad.<br />-¿No habrá confundido delfines con fantasmas, señor Howard? –me dijo con un tono ciertamente irónico.<br /><br />Lo pensé y el capitán debía tener razón. Sin duda me había sugestionado enormemente. Algo debía haber estado soñando, luego la luminosa noche, las sombras que producía la luna llena y unos delfines hicieron el resto. Estaba tremendamente avergonzado.<br />-Lamento el espectáculo que he ofrecido, capitán.<br />-No lamente lo que acaba de ocurrir. Mejor discúlpese por haber roto una de las normas.<br />-No se a qué se refiere –aunque en el fondo sí lo sabía.<br />-Creo que recuerda hace unas dos semanas a alguien escondido tras unos fardos espiando. ¿Le suena señor Howard? –otra vez aquel señor Howard. Cuando el capitán se sentía seguro me lo lanzaba con tono de superioridad.<br />-No podía dormir…<br />-Howard, si no respeta las normas no podré protegerle –estas palabras no las dijo con tono irónico de superioridad. Esta vez sonaba a consejo paternal. Y viniendo del capitán no pude hacer más que escuchar con mucha atención.<br /><br />Ahora el capitán varió su discurso, moduló su voz para contar una historia, su historia.<br />-Howard, usted es un hombre de cultura, por lo que no juzgará negativamente esta historia que le contaré. Nací a finales de mil ochocientos setenta y tantos, no recuerdo exactamente el año, pero sí que fue hace mucho tiempo, en la costa de Nueva Inglaterra. Mi padre pasaba la mayor parte de su tiempo bebiendo, por lo que fue mi madre quien se ocupó de mí y de mis siete hermanos. Yo era el mayor de todos y ya desde pequeño tuve la responsabilidad de colaborar para sacar adelante mi familia. Primero como estibador en el puerto. Luego, una vez murió mi padre, me dediqué a otros “trabajos” menos legales. Así empezó mi carrera como contrabandista, unas veces eran alimentos y otras como en este caso licores. No conozco otro oficio, en definitiva un modo de ganarme la vida, fuera de la ley, pero sin hacer daño a nadie. Siempre he sido el responsable de mi vida, nunca he permitido que nadie decidiera por mí –hizo una pequeña pausa y prosiguió-. Entenderá Howard, que tratar con estos rufianes no es nada fácil. Para mantener una disciplina hay que usar de mano dura con ellos. Así lo fui aprendiendo, la vida es la mejor universidad, y usted me disculpará por hablar en estos términos, pero quien no aprende de la vida termina siendo engullida por ella. Hay que tomar nota de cada señal que nos da, pues posiblemente no nos dé un segundo aviso. La experiencia me ha demostrado que la única forma de mantener el control en estos negocios es no ser blando, ser inquebrantable con las decisiones que se toman.<br /><br />El capitán se sentó en unos cabos que enrollados y amontonados formaban una especie de taburete. Se encendió un cigarrillo, expulsando el humo con parsimonia.<br />-Siéntese, Howard –me dijo, señalando otros cabos dispuestos de la misma forma.<br />-Gracias, capitán.<br />-¿Por qué le cuento todo esto se preguntará?, porque no soy el único que se ha enterado de su correría nocturna Howard. La tripulación sabe lo que no debería, que usted conoce cual es nuestra carga y a qué se dedica este navío. Y están intranquilos, se encuentran muy nerviosos. Conozco a este tipo de personas como si fuesen mis hijos, sé cuales son sus pensamientos y sus reacciones. Y Howard, ambos son de lo más primario, de lo más instintivo. Comentan entre ellos, los he sorprendido formando corros, conspirando. Me gustaría equivocarme, pero lo sé, el siguiente paso será pedirme que lo arroje por la borda. Los podré controlar por un tiempo, no sé cuanto, pero lo intentaré hasta que lleguemos a Londres. Lo contrario supondría un motín, una rebelión para hacerse con el barco.<br />-¿Por qué lo hace, por qué me defiende si no me conoce capitán? Otra opción sería aceptar la propuesta de sus marineros ¿no? Así se ahorraría usted muchos problemas –dije, intentando llegar a las conclusiones últimas del capitán.<br />-Howard, aunque usted crea que soy una persona sin principios, los tengo. Cumplo unas leyes que son las del mar, pero a diferencia de esta chusma, sigo unas normas que para mi son inmutables y entre ellas está la palabra dada. Le dije que le llevaría a Londres y así lo haré. Además aceptar las condiciones de ellos sería recortar una parte de mis poderes y dárselos a ellos. Al final el resultado vendría a ser el mismo, pues ellos seguirían reclamando más poder de decisión.<br />-Se lo agradezco en el alma capitán, ahora sé que la integridad no conoce de clases o cultura, sino de personas. Y usted es una de ellas.<br />-Ahora, Howard, vuelva a su camarote y descanse. Le ruego que a partir de este momento reduzca sus salidas al exterior al máximo.<br />-Buenas noches capitán –regresé a mi camarote sabiendo que mi vida peligraba en el barco, pero también que no estaba solo en esta arriesgada travesía.</span></div>MIDIANhttp://www.blogger.com/profile/02421889809268175173noreply@blogger.com0