martes, 30 de junio de 2009

#1

Tanto tiempo pensando en escribir en un blog y ahora estoy aquí sentado delante del ordenador y con una sola cosa en claro, el título de mi blog. Lo primero que pienso es en los contenidos ¿deberían seguir todos una misma línea?, ¿un contenido pretencioso?, ¿quizás metafísico?, ¿sobre juicios de valor de la vida? ¿con humor?... Ni idea, no se sobre lo que escribiré.

Y como lo que tenía claro era el título, comentaré que lo que si quiero es hacer un homenaje con este título, no solo a la obra de Philip K. Dick y su novela, esta ya si, metafísica “¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?” llevada a la pantalla por Ridley Scott (Blade Runner) sino tambien a las tardes de cine en los ochenta en que iba con mis amigos a ver películas al salir de la facultad (y a veces sin entrar) y el regusto que nos dejaban películas como ésta. El libro lo leí años despues y creo que, sin caer en el tópico tan usado de que es mejor la novela que la película que se haga sobre ella, porque parece que es un sitio común y queda muy en el guión decir que he leido tal libro y luego he visto la película pero me ha decepcionado porque no transmite toda la intensidad de aquél. Como decía, la novela es magnífica, y lleva a pensamientos sobre la creación, las diferencias y el odio contra ellas, el amor y otras “simplezas” por las que pasamos muchas veces de puntillas. La película es también magnífica y lleva al mismo pensamiento. Por cierto, genial la música de Vangelis.

Pues con este comienzo ya sabeis un poco más sobre cuales son mis gustos y por donde van a ir los tiros de este blog, el cine me pierde, pero tambien la comida, los viajes, la música de cine…y esto se está pareciendo a la presentación para una página de contactos, por lo que paro aquí de enumeraciones. Lo que si me gustaría, es no convertir cada escrito en un alegato monocolor, en una crítica despiadada y en un juicio de valor sin pretensión de contrario. No soy un lector asiduo de blogs, lo confieso, pero sí he leido el de alguna persona que para hacer una defensa a ultranza de sus valores de vida ataca sin piedad lo contrario, y da lo mismo que sea política, religión, cultura de vida, decisiones personales, etc., por otro lado qué fácil es cerrarse en banda en una creencia o posición en la vida y no hacer un pequeño esfuerzo en ver por qué alguien está en el otro lado (lo que sería ponerse en la piel y pensamiento del otro), a lo mejor realizando este ejercicio hacemos más flexibles nuestras convicciones y dejamos una puerta para su enriquecimiento, con lo que lograriamos un pensamiento más amplio, con más matices. O a lo mejor comprobamos que en el fondo nuestras ideas se tocan en más puntos de lo que pensábamos con las ideas de la otra persona (esto daría miedo a muchos que llevan sus ideas a extremos) y como en el caso anterior podemos volver a enriquecer nuestras bases. ¿Dónde reside la verdad? ¿dónde podemos encontrarla? ¿quién es el dueño de la misma? Ya me gustaría conocer estas respuestas, mientras, me voy haciendo idea escuchando a unos y a otros.

Ya se, quiero contar algunas cosas, lo que en cada momento me identifique más con lo que siento. Si hay alguien que lo lea creo que será gente normal, entendiendo ésta (la normalidad) como la humildad en un sentido amplio, como una forma de vida que ejercen la mayoría de las personas, pero que al permanecer en el anonimato no destacan para conocimiento de la mayoría, pero que en realidad son los que mantienen este hilo de cordura dentro del mundo en que vivimos. Y un apunte personal, si a este aspecto de normalidad se le añade un punto de sensatez estamos ante un tipo de persona de lo más interesante.

Dejaré que el androide que llevo dentro sueñe, y cuando despierte nos cuente sus sueños a través de este blog.